MADRID 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
Científicos de la Universidad de Southamptonhan (Reino Unido) han dado un gran paso hacia el desarrollo de un análisis de sangre que podría identificar a millones de personas que contagian la tuberculosis sin saberlo.
Un estudio pionero publicado en la revista 'Journal of Clinical Investigation Insight' ha descubierto un grupo de marcadores biológicos que se encuentran en altos niveles entre los pacientes infecciosos.
Los investigadores esperan que los hallazgos allanen el camino hacia una prueba sencilla que pueda diagnosticar y detener la propagación de los 10 millones de casos que se calcula que se producen anualmente.
La tuberculosis es la enfermedad infecciosa más mortífera del mundo y mata a más de un millón de personas al año, según datos de la Organización Mundial de la Salud.
Ahora, científicos de la Universidad de Southampton, en colaboración con expertos de todo el mundo, llevaron a cabo el análisis más detallado jamás realizado de los marcadores sanguíneos de la infección bacteriana.
El estudio utilizó una novedosa técnica que identificó un conjunto de seis proteínas muy precisas para detectar la tuberculosis. "La tuberculosis sigue siendo una catástrofe mundial porque nuestros esfuerzos por controlar su propagación se ven obstaculizados por unas pruebas inadecuadas, lentas y dependientes de equipos y laboratorios especializados", ha explicado la autora principal, Hannah Schiff.
"Un tercio de las personas infectadas no son diagnosticadas y siguen siendo infecciosas. En nuestro estudio, combinamos una nueva técnica de medición con un profundo análisis matemático para identificar estos seis nuevos marcadores de la enfermedad de la tuberculosis", ha explicado la investigadora.
"Podría dar lugar a una alternativa transformadora para diagnosticar la afección: una prueba sencilla que detecte proteínas en el torrente sanguíneo cuyos niveles difieran entre las personas con TB, los individuos sanos y quienes padecen otras enfermedades respiratorias", agrega.
CONTAGIO POR GOTITAS
La tuberculosis se propaga a través de la inhalación de diminutas gotitas procedentes de la tos o los estornudos de personas infectadas y, aunque afecta sobre todo a los pulmones, puede devastar cualquier parte del cuerpo.
Los casos en el Reino Unido ascendieron a unos 5.000 el año pasado, y se espera que sigan aumentando en 2024, según la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido.
El estudio de la Universidad de Southampton se realizó con expertos de la Universidad de Ciudad del Cabo (Sudáfrica) y la Universidad Cayetano Heredia de Lima (Perú). Se publicó con motivo del Día Mundial de la Tuberculosis, el 24 de marzo, que se celebra para concienciar e intensificar los esfuerzos para acabar con la pandemia mundial de tuberculosis.
Los investigadores compararon los biomarcadores con los de personas sanas y pacientes con infecciones pulmonares, e identificaron 118 proteínas que presentaban diferencias significativas entre los grupos.
A continuación, los expertos las redujeron a las seis proteínas que, según ellos, pueden utilizarse para distinguir a los pacientes contagiosos de tuberculosis de las personas sanas o con afecciones pulmonares.
Según la codirectora del estudio, Diana Garay-Baquero, también de Southampton, los hallazgos constituyen una hoja de ruta para desarrollar una prueba de la tuberculosis tan sencilla como los flujos laterales utilizados durante el Covid.
"Los nuevos marcadores que hemos descubierto son realmente emocionantes, pero lo importante ahora es convertirlos en pruebas que puedan utilizarse para los millones de personas que transmiten la tuberculosis sin saberlo", concluye.