MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española Interdisciplinar del Sida (Seisida) lamenta que la mitad de los nuevos diagnósticos de VIH que se registran en España sigan siendo tardíos, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, y asegura que las barreras más frecuentes están relacionadas con el sistema sanitario y con el estigma que rodea a la enfermedad.
Según los últimos datos publicados este jueves por el departamento de Alfonso Alonso, en 2014 se notificaron un total de 3.366 nuevos casos, de los que el 46,2 por ciento se detectaron de forma tardía, "uno de los problemas más importantes con los que se enfrenta la epidemia de VIH en España".
"Un diagnóstico tardío tiene implicaciones tanto para el paciente como en términos de Salud Pública", señala Piedad Arazo, presidenta de Seisida, que recuerda que el paciente no se beneficia de un tratamiento precoz que mejorará su calidad y expectativa de vida y, por otro, "al desconocer su estado de infección podría, si no se adoptan medidas de protección, transmitir el virus a otras personas".
Las tasas de diagnóstico tardío, no obstante, son similares a las de otros países de la región Europea, aunque superiores a la media de los países de Europa Occidental y de la Unión Europea.
Además del estigma y el sistema sanitario, un estudio de Seisida apunta que otros factores claves que influyen en ese retraso diagnóstico son la percepción de riesgo, el sentirse capaz de ir a hacérsela, la cercanía a personas que se hacen el test, los beneficios de conocer el diagnóstico y la utilidad y que no genera emociones estresantes.
El estudio muestra también que un optimismo 'irrealista', la sensación de invulnerable y los estereotipos sobre la infección y la gravedad percibida del VIH, también tienen un papel relevante en la decisión de no hacerse el test.
Otro dato del informe de Sanidad indica que el 84,7 por ciento de los nuevos diagnósticos eran hombres con una media de edad de 35 años y la mitad (53,9%) se da en hombres que tienen sexo con otros hombres.
Arazo subraya que gracias a los avances en el diagnóstico y en el tratamiento, la mayoría de las personas con VIH está bien tratada y controlada. Sin embargo, existen dos problemas importantes que nos obligan a estar "muy alerta" y a seguir trabajando juntos: el diagnóstico tardío y el hecho de que, por algún motivo, "las campañas prevención no está llegando a muchas personas".
Estas dos situaciones, explica, hacen que en los últimos años se estén diagnosticando "muchos casos de VIH en personas muy jóvenes". Según la experta, "las poblaciones más vulnerables" deben tomar conciencia de que el VIH es una "infección de graves consecuencias".