MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
Sufrir un resfriado es bastante molesto, pero si estás solo, es probable que te sientas aún peor, según señalan investigadores de la Universidad de Rice, en Houston, Texas, Estados Unidos. Un estudio dirigido por el psicólogo de Rice Chris Fagundes y la estudiante de posgrado Angie LeRoy reveló que las personas que se sienten solas son más propensas tener síntomas de resfriado más graves que los que tienen redes sociales más fuertes.
"La soledad pone a las personas en riesgo de mortalidad prematura y todo tipo de otras enfermedades físicas --explica LeRoy--. Pero no se ha hecho nada por ver una enfermedad aguda pero temporal a la que todos somos vulnerables, como el resfriado común". Los investigadores, cuyo trabajo se publica en 'Health Psychology', hicieron una distinción entre sentir aislamiento social y la soledad real.
"Este artículo trata sobre la calidad de las relaciones, no la cantidad --describe LeRoy--. Puedes estar en una habitación llena de gente y sentirte solo. Ésa percepción es lo que parece ser importante cuando se trata de estos síntomas de resfriado". Llevar a cabo esta tarea significaba encontrar personas solas, aislarlas y que cogieran un resfriado.
Un total de 159 personas de 18 a 55 años de edad, casi el 60 por ciento de ellos hombres, fueron evaluados por su salud física y psicológica, se les dieron gotas nasales que inducían el constipado y se mantuvieron durante 45 días en habitaciones de hotel. Se siguió a los participantes, inscritos previamente en 'Short Loneliness Scale and the Social Network Index', durante y después de un estadía de cinco días.
Después de ajustar por datos demográficos como el sexo y la edad, la temporada, el sentimiento depresivo y el aislamiento social, los resultados mostraron que aquellos que se sentían solos no eran más propensos a tener un resfriado que los que no lo eran.
UN EFECTO SIMILAR A ESTAR BAJO FACTORES DE ESTRÉS
Sin embargo, los que fueron evaluados de antemano por su nivel de soledad y se infectaron con el catarro --no todos los participantes-- informaron de una mayor gravedad de los síntomas que los registrados en estudios previos utilizados como controles. El tamaño de las redes sociales de los participantes parecía no tener relación con cómo de enfermos se sentían.
"Investigaciones anteriores han demostrado que diferentes factores psicosociales como sentirse rechazado o sentirse excluido o no tener fuertes lazos sociales con otras personas hacen que la gente se sienta peor física, mental y emocionalmente --apunta LeRoy--. Así que teníamos ese marco general para trabajar".
El efecto puede ser el mismo para aquellos bajo otros tipos de estrés, según Fagundes. "Cada vez que una persona tiene una enfermedad, es un factor de estrés, y este fenómeno probablemente ocurriría -dice--. Una predisposición, ya sea física o mental, puede ser exagerada por un factor de estrés posterior. En este caso, el factor estresante posterior es estar enfermando, pero podría ser la pérdida de un ser querido, o el cáncer de mama, que son temas que también hay que estudiar".
"Lo que hace que este estudio sea tan novedoso es el diseño experimental estricto. Todo se trata de una predisposición particular (soledad) que interactúa con un factor de estrés particular", apunta. "Los médicos deben tener en cuenta factores psicológicos en la atención estándar --propone Fagundes--. Definitivamente les ayudaría a entender el fenómeno cuando la persona enferma".
"Creemos que esto es importante, sobre todo debido a la carga económica asociada con el resfriado común --agrega LeRoy--. Millones de personas pierden el trabajo cada año por eso y eso tiene que ver con lo que sienten, no necesariamente con lo mucho que les molestan las narices". A su juicio, los hallazgos son también un incentivo para ser más socialmente activos. "Si construyes esas redes -trabajando constantemente en ellas y en sus relaciones-- cuando enfermas, puede que no te sientas tan mal", concluye.