MADRID 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
La transición de los pacientes con artritis entre los cuidados del niño a la consulta del adulto constituye una etapa clave para los pacientes que se encuentran en la adolescencia y sigue siendo uno de los retos a los que se enfrentan los especialistas. Este ha sido uno de los ejes principales en la cuarta sesión de la V Jornada de Actualización en Artritis Idiopática Juvenil (AIJ), que se ha celebrado en A Coruña organizada por la Sociedad Española de Reumatología Pediátrica (SERPE), con la colaboración de la compañía biofarmacéutica AbbVie.
Aunque habitualmente se identifica a la artritis reumatoide como una enfermedad exclusiva de adultos, también aparece en niños y adolescentes bajo la denominación de 'artritis idiopática juvenil', considerada la enfermedad reumática infantil más frecuente.
Durante la jornada, que ha reunido a reumatólogos, pediatras, gastroenterólogos y psiquiatras, se ha puesto de manifiesto la importancia de la atención multidisciplinar en este proceso de cambio para los pacientes y su entorno. El objetivo, para los expertos, consiste en reflexionar acerca del abordaje actual de la AIJ para mejorar la asistencia a los pacientes y minimizar el impacto en su calidad de vida.
COORDINACIÓN ESTRECHA ENTRE ESPECIALIDADES
Junto a la coordinación entre distintas especialidades, es básica la homogenización de los criterios multidisciplinares relacionados con la transición, como ha destacado el reumatólogo del Complexo Hospitalario Universitario A Coruña, Jenaro Graña, "las actuaciones sanitarias, educativas y sociales durante el período de transición son un tema de creciente preocupación y tanto el Colegio Americano de Reumatología (ACR) como la Liga Europea contra las Enfermedades Reumáticas (EULAR) tienen grupos de trabajo activos para desarrollar recomendaciones en este sentido.
El consenso español puso el problema encima de la mesa y alertó a las autoridades sanitarias. En él se detallan las diversas alternativas de transición que permiten una transferencia adecuada entre los servicios pediátricos y los adultos. La situación actual es muy heterogénea y no hay una recomendación simple que sirva para todos los casos pero sí una herramienta que siempre funciona, la comunicación abierta y positiva entre pediatras y reumatólogos".
En relación a la coordinación estrecha entre pediatras y reumatólogos, los especialistas consideran favorable la existencia de más unidades y consultas especializadas para el paciente con AIJ. En este sentido ha coincidido el jefe de Sección de Reumatología del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela, Antonio Mera, "en nuestro caso decidimos que lo mejor era una consulta interdisciplinaria compuesta por un reumatólogo con conocimiento de la reumatología infantil y un pediatra. Está funcionando desde hace años a la perfección. Además, los padres están encantados porque ven que sus hijos resuelven en un solo acto la consulta de la enfermedad de su hijo".
Como parte de este abordaje multidisciplinar, es preciso que se planifique previamente el proceso a seguir mediante la coordinación de los diversos especialistas implicados, como destaca el gastroenterólogo infantil del Complexo Hospitalario Universitario A Coruña, Alfonso Solar, "para que esta trasferencia sea más efectiva, la programación se debe realizar de forma personalizada, teniendo en cuenta las características y circunstancias del paciente y del centro dónde se realiza dicha asistencia".