MADRID, 6 Sep. (EUROPA PRESS) - Una nueva investigación presentada en el Congreso Internacional de la Sociedad Respiratoria Europea sugiere que el entorno aparentemente inocuo de una oficina puede provocar asma en algunos trabajadores. El estudio descubrió diversos factores desencadenantes, desde el tóner de las impresoras y los productos de limpieza hasta la mala ventilación y el moho que circula por el aire acondicionado. También se descubrió que los empleados con asma provocada por el trabajo de oficina dejaban sus puestos de trabajo y, si los empresarios no hacían cambios para atajar el problema, esto era más frecuente.