MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) - El colesterol alto, un importante factor de riesgo para las enfermedades del corazón, afecta a casi 94 millones de estadounidenses, y a 1 de cada 2 adultos mayores de 50 años. Mientras que la mayoría de los médicos se apresuran a recetar fármacos (como las estatinas) para el tratamiento, un nuevo estudio apunta a una alternativa eficaz para los millones de estadounidenses afectados, especialmente aquellos que pueden estar preocupados por los efectos secundarios de la medicación.