Malformacion Arteriovenosa
¿Qué son las malformaciones arteriovenosas?
Las malformaciones arteriovenosas (MAV) se forman cuando las arterias del cerebro se conectan directamente con las venas cercanas, sin mediar los capilares entre ellas, formando nidos y ovillos. Son siempre congénitas y crecen con la edad de modo que, a medida que pasa el tiempo, estos vasos se deterioran y pueden romperse. Como consecuencia de este problema pueden aparecer hemorragias de forma precoz, en torno a los 20 años. Se estima que afectan al 1% de la población, sin distinción de género ni raza.
Además de las hemorragias, pueden aparecer los llamados “robos” de sangre que producen una disminución del riego en el tejido cerebral sano que, en función de las neuronas circundantes a la malformación, pueden causar dos tipos de síntomas: déficits neurológicos y epilepsia
Síntomas de las malformaciones arteriovenosas
En más de la mitad de los casos, los síntomas aparecen después de que se produzca una hemorragia, en un 40% se produce con crisis epilépticas y el resto por alteraciones neurológicas por falta de riego sanguíneo. Mientras no se halle otra causa un episodio de epilepsia unido a un cuadro hemorrágico, en una persona joven, es indicativo de una malformación arteriovenosa.
Tratamiento de las malformaciones arteriovenosas
Una vez localizada la malformación, en lo primero que hay que pensar es excluirla de la circulación, eliminándola y manteniendo la circulación colateral.
Actualmente, se dispone de tres técnicas para tratarlas que se pueden utilizar individualmente o de forma combinada. Es importante que el tratamiento lo lleve a cabo un equipo multidisciplinar, formado por neurocirujanos y especialistas en terapia endovascular.
- Microcirugía: La resección quirúrgica es el tratamiento de elección, ya que elimina el riesgo de sangrado de forma inmediata, pero es una opción invasiva. Si el riesgo quirúrgico es alto, recurrimos a Radiocirugía y a técnicas endovasculares.
- Radiocirugía: Administramos radiación en la pared vascular para cerrar el vaso. Para ello contamos con las últimas técnicas de radiocirugía porque las dosis administradas tienen que ser altas y la precisión debe ser muy elevada.
La tasa de eficacia se sitúa en el 70% de las malformaciones menores de 3 cm.
Si son mayores, no está indicada la radiocirugía
- Técnicas endovasculares: Su indicación principal es facilitar el tratamiento micro o radioquirúrgico para resolver las malformaciones ateriovenosas.
Causas de las malformaciones arteriovenosas
Las malformaciones arteriovenosas son el resultado de una alteración en el desarrollo durante el período embrionario o fetal, sin que se tenga muy clara la causa que puede ocasionarlas.
Diagnóstico de las malformaciones arteriovenosas
En el diagnóstico de las malformaciones arteriovenosas se emplean diferentes técnicas de imagen. Cuando se produce una hemorragia, el TAC es el mejor método para detectarla. Con esta prueba, además, se ve si hay calcificaciones propias de estas malformaciones.
La Resonancia Magnética nos permite ver la relación que hay entre la malformación arteriovenosa y el parénquima cerebral que hay cerca de la lesión, además de analizar el flujo y descartar que se trate de un tumor que haya sangrado u otro tipo de malformación.
La Angio-resonancia es una prueba no invasiva que nos muestra más datos sobre la anatomía de la malformación.
Por último, está la Arteriografía, que es la prueba que nos muestra el tipo y la dinámica de la lesión.
Nombre:Dr. Rafael García de Sola
Centro:Hospital Nuestra Señora del Rosario
Madrid
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