MADRID 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los investigadores han desarrollado un prototipo de filtro solar respetuoso con los arrecifes de coral utilizando la polimerización para crear moléculas de gran tamaño que siguen bloqueando la radiación UV pero son demasiado grandes para penetrar en nuestra piel, corales y algas. El filtro UV polimérico, presentado en la revista 'Cell Reports Physical Sciences', resultó más eficaz para prevenir las quemaduras solares en ratones que los protectores solares existentes.
"Se trata de una exploración inicial de una nueva estrategia para diseñar filtros UV poliméricos respetuosos con la naturaleza y los corales --afirma Lei Tao, químico de la Universidad de Tsinghua (China) y autor principal del trabajo--. Esperamos que esto conduzca a la próxima generación de protectores solares".
Tao se inspiró para explorar protectores solares respetuosos con el medio ambiente tras visitar la Gran Barrera de Coral en 2010. "Me quedé alucinado con la belleza de los corales, y desde que supe que los protectores solares son una de las causas del blanqueamiento del coral, no dejé de pensar en formas de desarrollar un protector solar respetuoso con los corales", recuerda.
Para ello, el equipo de Tao utilizó primero una reacción química para generar al azar distintas moléculas en forma de anillo con estructuras similares a la avobenzona, un filtro UV ya existente.
A continuación, utilizaron una segunda reacción química para unir estas moléculas en forma de anillo en distintas combinaciones, creando así un conjunto de polímeros candidatos entre los que elegir. Los investigadores seleccionaron el mejor candidato comparando el valor FPS de los polímeros y su capacidad para absorber la radiación UV.
Cuando los investigadores probaron la capacidad del polímero ganador para prevenir las quemaduras cutáneas inducidas por los rayos UV en ratones, descubrieron que era significativamente superior a la oxibenzona, la avobenzona y dos protectores solares comerciales. Además, era seguro: los ratones no absorbieron el polímero a través de la piel, ni experimentaron inflamación u otros daños cutáneos.
El filtro UV de polímero tampoco parece ser peligroso para los corales y las algas, dos grupos de organismos que se ven perjudicados por los protectores solares químicos disponibles en la actualidad. Las algas Chlorella no se vieron afectadas cuando el equipo las cultivó en presencia de pequeñas cantidades del polímero, al igual que dos tipos comunes de coral. Estos mismos corales se decoloraron y murieron a los 6 y 20 días de exposición a la oxibenzona, respectivamente.
Una advertencia del filtro UV es que no es biodegradable debido a la estructura de su columna vertebral química, pero los investigadores afirman que éste es sólo el primer paso hacia el desarrollo de la próxima generación de filtros UV seguros para el medio ambiente.
"Tenemos algunas ideas para otras metodologías de polimerización no aleatoria que podríamos combinar con el grupo químico que desarrollamos en este estudio para crear un filtro UV respetuoso con el medio ambiente y fácilmente biodegradable --dice Tao--. Mientras tanto, intentaremos trabajar con empresas para probar el polímero actual y ver si puede utilizarse en protectores solares".