MADRID, 25 May. (EDIZIONES) -
La Academia Americana de Oftalmología (AAO, por sus siglas en inglés) recuerda que muchas afecciones de los ojos se pueden corregir si se descubren y tratan a tiempo. De hecho, todos los problemas visuales que puedan aparecer, y no sean patológicos, llevan un proceso, suelen empezar de forma leve y después van progresando. Por eso detectarlos a tiempo es fundamental.
"Hacer las revisiones de manera periódica hace que cualquier problema visual se pueda intervenir en los estadios iniciales. Será más sencillo y rápido el tratamiento para el paciente, y se logrará el éxito lo antes posible", afirma en una entrevista con Infosalus la presidenta de la Sociedad Internacional de Optometría del Desarrollo y Comportamiento (SIODEC) Gloria Hermida.
Esta especialista remarca que, si no hay ninguna dificultad que conozcamos, lo mejor es proceder durante la edad adulta a una revisión anual en la que se realice un examen ocular que evalúe, entre otros puntos, la agudeza visual (cuánto vemos, o qué tamaño de letra vemos en la distancia, por ejemplo), la refracción (la medida de cuánta graduación necesitas poner para ver mejor, o que tu sistema binocular funcione mejor), y el estado de la visión binocular (evaluar cómo nuestros ojos se coordinan).
"Muchos de los síntomas que se presentan son debido a problemas binoculares, los que más cuesta detectar, y que pueden derivar en una visión borrosa de cerca o en un dolor de cabeza; y esto a la larga puede redundar en una menor eficacia laboral y menor rendimiento escolar", añade Hermida.
POR ETAPAS
Para empezar, desde la AAO remarcan con ello que es esencial examinar la visión de los niños al nacer y durante la infancia, así como en la edad preescolar y en los años escolares. "Estas evaluaciones pueden ser realizadas por un pediatra, un médico de familia u otro proveedor de salud debidamente capacitado", indica.
En concreto, cita que la Academia Americana de Oftalmología y la Asociación Americana de Oftalmología Pediátrica y Estrabismo recomiendan realizar los siguientes exámenes:
.- En los neonatos. Un oftalmólogo, un pediatra, un médico de familia u otro profesional de la salud, debidamente capacitado, debe examinar los ojos del recién nacido.
.- En los bebés. Se debe realizar una segunda evaluación oftalmológica practicada por un oftalmólogo, un pediatra, un médico de familia u otro profesional de la salud, debidamente capacitado, durante un examen para determinar el buen estado de salud del bebé a los seis meses y al cumplir un año de edad.
En este sentido, la óptico optometrista de SIODEC considera que la primera revisión siempre se aconseja que se realice a los 6 meses de vida. "Es en esta etapa donde todo el sistema visual hace lo que llamamos el 'primer hito visual', que es la binocularidad. Ahí se puede saber si su sistema binocular se desarrolla con normalidad o hay que proceder a una intervención preventiva", precisa.
.- En los preescolares. Entre los 3 y 3 años y medio debe hacerse una evaluación de la visión y la alineación ocular del niño por parte de un pediatra, un médico de familia, un oftalmólogo, un optómetra, un ortoptista, o una persona capacitada en evaluación de la visión de niños de edad preescolar. Se trata de la etapa en la que empiezan a usar la identificación de formas, y necesitan más precisión en su enfoque. "Es muy importante detectar problemas a tiempo porque si hay graduación no prescrita en gafas hay que ponerla", indica la presidenta de SIODEC.
.- Niños en edad escolar. Al ingresar en el colegio, o siempre que se sospeche de un problema, deben examinarse los ojos de los niños para determinar la agudeza visual y la alineación.
.- Los adultos: Igualmente, desde la AAO recomienda que los adultos se hagan un examen ocular completo a los 40, ya que se trata del momento en el que pueden aparecer los primeros signos de enfermedad o cambios en la visión. Es importante la detección temprana de las enfermedades oculares. El tratamiento temprano puede ayudar a preservar su visión.
Eso sí, precisa que no todos deben esperar a esa edad para examinarse de la vista de forma completa, y deben consultar de inmediato a un oftalmólogo si tienen una enfermedad ocular o si tienen factores de riesgo que incluyen: diabetes, hipertensión, historia familiar de enfermedad ocular. Finalmente, si tienen más de 65 años recomienda examinarse de la vista cada año o cada dos años.