¿Qué hago si me sale un orzuelo?

Orzuelo
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Actualizado: miércoles, 29 marzo 2017 7:16

   MADRID, 29 Mar. (EDIZIONES) -

   El orzuelo es una tumoración infecciosa circunscrita, aguda y dolorosa de los párpados. Los hay de dos tipos, externos e internos. "Los que afectan a las glándulas sebáceas de las pestañas se llaman orzuelos externos, y luego están los que afectan a las glándulas de meibomio, que son las que están detrás de las pestañas. A la inflamación de éstas se la conoce como 'chalacium' o orzuelo interno", precisa a Infosalus el secretario general de la Sociedad Española de Oftalmología, el profesor José Manuel Benítez del Castillo.

   Según explica, estas protuberancias se producen en el ojo porque, cuando se inflaman las glándulas sebáceas, las grasas que se producen tienen tendencia a solidificarse. Al salir esa grasa por los orificios de la piel baja la temperatura y esta grasa se solidifica, dando lugar a un tapón, que impide que el resto de grasa salga, y se forma un quiste o orzuelo.

   "Lo que nota el paciente es que se le hincha el párpado y nota dolor, como síntomas principales. Incluso si se va a tocando párpado hay un sitio especial donde le duele, la glándula inflamada, aunque se hincha todo el párpado. En resumen, dolor y tumefacción a la presión del párpado", señala el experto.

   Benitez del Castillo indica que las personas que alguna vez han tenido orzuelos es porque padecen blefaritis crónica o inflamación del borde del párpado. En concreto, cita que tienen mayor predisposición las personas con rosácea, con demartitis seborreica, o con enfermedades de la piel. "Existe también predisposición familiar a tener estas enfermedades de la piel, pero lo que en parte se hereda no es el orzuelo", precisa.

   Además, sostiene que las personas que a menudo padecen de orzuelos tienen temporadas mejores y peores, que suelen coincidir con mayores épocas de estrés en el trabajo o por exámenes. "Igual hay temporadas que le salen un montón y otras no", añade.

   Sobre cuándo acudir al especialista, el oftalmólogo destaca que "siempre", y desde el primer momento, porque puede ser un orzuelo o no. "Hay que estudiar qué es para que se haga un tratamiento adecuado y no se enquiste. Además si se tarda en ofrecer un tratamiento esa grasa puede encapsularse y hay que intervenir quirúrgicamente", agrega.

   De hecho, indica que "abrir sería la opción extrema", y si se procede a ello es porque esa grasa acumulada y solidificada con el tiempo es rechazada por el cuerpo. "Esa grasa no es líquida y se obstruye y se empieza a acumular. Con el tiempo esa grasa es rechazada por el cuerpo, es un cuerpo extraño, se forma una cápsula, se puede calentar y licuar, pero si está solidificado no se puede", remarca.

¿CÓMO SE TRATAN LOS ORZUELOS?

   Benitez del Castillo apuesta por el uso de antiinflamatorios, de analgésicos, y también el tratamiento con calor del orzuelo, durante cuatro o cinco veces al día, para que esa grasa se disuelva (al estar solidificada), además de proporcionar un masaje al orzuelo tras el calor para que pase de estado sólido a líquido y se funda. "Si hay una cápsula no va a poder salir, tiene que darse en las primeras semanas del orzuelo porque sino se enquista", destaca el oftalmólogo. En este sentido, menciona las pomadas específicas que sirven para evitar la sobreinfección "pero hacen muy poco".

   "En las farmacias siempre mandan las mismas pomadas, que ayudan, pero el tratamiento base es calor y masaje cuatro o cinco veces al día. Da igual que el calor sea seco o húmedo, con una gasa o con disco desmaquillante, lo más caliente que aguante uno, y sacarse la grasa que hay con el masaje. De esta forma el orzuelo se irá haciendo cada vez más pequeño. La pomada en algunos casos podrá ayudar. Si no se mejora se puede poner una inyección con un corticoide dentro del orzuelo", añade. Asimismo, explica que cuando no mejora, el orzuelo debe inyectarse con una aguja y se pincha el interior del quiste. "Ya si eso no responde hay que proceder a la cirugía.", apostilla el especialista.

Respecto al mito de introducir una llave en el frigorífico para después ponerla en el ojo y así bajar la inflamación del orzuelo, Benitez del Castillo subraya que esta técnica puede "quitar un poquito la inflamación", pero no tratar el proceso, que es un quiste graso al que hay que aplicar calor, y no frío, para que se disuelva.

   En cuanto a por qué vuelven a salir los orzuelos, una vez pasado todo este proceso, el experto reseña que se encuentra esa enfermedad de base, la blefaritis, y el estrés, por ejemplo, hace que vuelvan a reproducirse.