MADRID, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
La pérdida de cabello en las mujeres de mediana edad es común y afecta hasta a dos tercios de las mujeres después de la menopausia. Las razones exactas siguen sin estar claras, aunque las pruebas sugieren una predisposición hormonal y genética. Una presentación en la Reunión Anual de la Sociedad Norteamericana de Menopausia (NAMS), resalta que hay nuevas terapias ofrecen esperanza para minimizar la pérdida de cabello en las mujeres de mediana edad.
Hay muchos tipos diferentes de pérdida de cabello que se producen con la edad. En algunos (no cicatrizantes), el folículo piloso se conserva y el cabello tiene la posibilidad de volver a crecer. Otras (cicatriciales) se caracterizan por la destrucción irreversible de los folículos pilosos que no permiten la reposición del cabello.
En la actualidad, el término más utilizado en las mujeres es el de pérdida de cabello de patrón femenino (también conocido como alopecia androgenética). Aunque es similar a lo que ocurre en los hombres, los patrones de pérdida de cabello en las mujeres suelen ser diferentes.
En la caída del cabello de patrón femenino, la fase de crecimiento del cabello se acorta y hay menos cabellos en fase de crecimiento activo. Los folículos pilosos se encogen, lo que hace que el cabello se vuelva más fino y que disminuya el número de cabellos en general.
Las mujeres suelen informar de un adelgazamiento progresivo de la cola de caballo, de una mayor visibilidad del cuero cabelludo y de la facilidad con la que se quema el sol. Suele haber una conservación de la línea capilar frontal con un adelgazamiento central difuso y una acentuación de la línea parcial con aspecto de árbol de Navidad.
El tratamiento incluye la aplicación diaria de minoxidil tópico al 5% y puede llevar al menos tres meses antes de obtener resultados notables. La finasterida es un inhibidor de la 5-reductasa que está aprobado por la FDA para la caída del cabello en los hombres.
Como indicación no autorizada, puede ser eficaz en las mujeres, aunque pueden ser necesarias dosis más altas. señalan los autores. Otros tratamientos son la drospirenona que contiene ACO y la espironolactona. Entre las nuevas terapias que están surgiendo figuran las inyecciones de plasma rico en plaquetas.
"Dado que algunas afecciones médicas pueden provocar la pérdida permanente del cabello y ser signos de enfermedades más graves o de enfermedades dermatológicas, es importante el diagnóstico precoz. En algunos casos, puede ser necesario realizar biopsias para obtener un diagnóstico preciso", afirma la doctora Alison Bruce, de la Clínica Mayo.
"La pérdida y el adelgazamiento del cabello es una preocupación de muchas mujeres de mediana edad. Las presentaciones que abordan este importante tema son especialmente valiosas y oportunas para que los profesionales de la salud estén preparados para tratar el tema con sus pacientes", añade el doctor Faubion, director médico de la NAMS.