MADRID, 14 May. (EDIZIONES) -
Las mascarillas han llegado para quedarse, al menos durante un tiempo, y con ellas han reaparecido o se han agravado algunos problemas en la piel. Y es que su uso durante varias horas tiene un efecto oclusivo sobre la misma.
"Las mascarillas están produciendo numerosas irritaciones e infecciones en la piel, empeorando enfermedades como el acné o la rosácea debido al efecto oclusivo que produce", afirma en una entrevista con Infosalus el doctor en Medicina y Cirugía y dermatólogo oncológico y estético, el doctor Ricardo Ruiz Rodríguez, quien acaba de publicar 'Lo que tu piel dice de ti' (La Esfera de los Libros).
Sobre todo, el director de la Clínica Dermatológica Internacional asegura que las personas que tienen tendencia a padecer acné o rosácea son las que se están viendo más perjudicadas por el uso de la mascarilla, ya que pueden sufrir un empeoramiento de sus lesiones que, en ocasiones, puede llevarles a necesitar tratamientos por boca para curar su enfermedad de la piel.
Y es que, según explica la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) la piel y las mucosas actúan como primera línea de defensa contra los agentes externos. "Debemos intentar mantener esa barrera lo más intacta posible para que continúe ejerciendo su función correctamente. Así como tratar de forma precoz las posibles alteraciones que puedan aparecer", agregan.
Con ello, el experto subraya que las mascarillas que más lesiones producen son las de tela que no son de algodón, o aquellas mascarillas que ya están sucias. Por ello aporta los siguientes 5 consejos para que las mascarillas no estropeen tu piel:
Por la mañana: limpia la piel con un jabón hipoalergénico, suave, y después usa una crema hidratante no comedogénica. No uses productos irritantes como acido glicólico o retinol. La oclusión más el sudor aumentan su capacidad irritante. No usar mucho maquillaje, sobre todo en la zona cubierta con la mascarilla.
Por la noche: limpiar otra vez bien la cara. Evitar excesiva exfoliación. Hidratar bien la piel. Cuidados con los productos 'antiaging' como el ácido retinoico o retinoles, porque pueden irritar más al haber oclusión y humedad durante el día.
Elige mascarillas de algodón 100% para evitar estas lesiones. En caso de exposición a ambiente con posible carga viral, usa las mascarillas FFP2. Usa una nueva mascarilla cada día. Si es lavable, usa detergentes suaves sin fragancias. aclara bien después de lavar. Descansa de la mascarilla cuando estés solo, y quítatela 15 minutos cada 3 o 4 horas para que la piel respire.
No olvides hidratar los labios también por la mañana y por la noche. Elige UN tipo de hidratante según tu piel: si es grasa, usa geles; si es normal o mixta, usa lociones; y, si es seca, usa productos tipo cremas.
Desde la AEDV añaden en este sentido que para que la mascarilla cumpla su función debe ajustarse correctamente a la cara. "Este hecho, unido a su uso durante largas horas de jornada laboral, favorece la aparición de xerosis, eritema, eccema seborreico, acné, rosácea o empeoramiento de patología preexistente", agrega.
A su vez para evitar la aparición de patologías proponen:
-Evitar usar maquillaje.
-Usar cremas hidratantes adecuadas para su tipo de piel y edad.
-Lavar la cara con agua templada y jabones limpiadores suaves y sin fragancias, evitando sustancias potencialmente irritantes.
-Si se identifican problemas cutáneos con un tipo concreto de mascarilla, intentar usar otra similar (en cuanto a nivel de protección) de materiales diferentes.