MADRID 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (AESEG), Mar Fábregas, ha confirmado este jueves que van a presentar al Ministerio de Sanidad una propuesta alternativa al sistema de precios de referencia del anteproyecto de Ley de los Medicamentos y Productos Sanitarios, que consiste en garantizar el dinamismo en las cuotas y los precios de los fármacos.
Este sistema permitiría que, a medida que se incremente las cuotas, también se revisen los precios de los productos, para lo que sería necesaria la creación de un observatorio, algo en lo que "también está de acuerdo" el propio Ministerio.
"Creemos que un sistema de cuotas y precios dinámicos es mejor que el sistema de precios seleccionados, puesto que sería un sistema predecible y monitorizable. Sería un sistema donde no se expulsan proveedores, por lo que las garantías de suministro serían todavía mayores. Sería un sistema sostenible, puesto que a mayor cuota de genérico, mayor revisión de precios", ha explicado.
Fábregas también ha señalado que este sistema contempla la diferencia de precio entre el genérico y la marca, lo que facilitaría la adherencia al tratamiento por parte del paciente, y es que ha considerado que la propuesta de Sanidad provocará una falta de adherencia al prevalecer el precio "sobre cualquier otra consideración", lo que pondría al paciente en la tesitura de continuar con su medicamento.
En ese sentido, ha instado a recuperar la preferencia del genérico sobre la marca, una serie de medidas que ya existían en España y que, tras su retirada, ha dado lugar a un estancamiento de la cuota durante una década.
A pesar de las diferencias con Sanidad, Fábregas ha agradecido su búsqueda de consenso con todos los actores implicados, tras lo que ha recordado que el anteproyecto incluye algunas de sus propuestas relacionadas con los precios de referencia, como es la creación del conjunto de homogéneos transcurridos doce meses desde el lanzamiento o matices en la creación de los conjuntos de precios de referencia.
Tras ello, ha insistido en su rechazo al sistema de precios de referencia, mostrando su confianza en que el diálogo con Sanidad desemboque en la adopción de su propuesta alternativa.
El modelo del Ministerio permite establecer una horquilla de precios dentro de la cual los medicamentos serán financiados de manera completa por el Sistema Nacional de Salud, dando margen a los productores para diferenciarse y diversificando el suministro de medicamentos equivalentes entre sí para el sistema público, y posibilitando que las compañías presenten ofertas de precio cada seis meses. Sanidad seleccionará los productos que, además de ofrecer un precio competitivo, garanticen el abastecimiento.
Asimismo, en caso de desabastecimiento de medicamentos, el texto contempla que los farmacéuticos puedan sustituir el fármaco recetado por otro, siempre dentro de una lista de medicamentos sustituibles.
"No permite ninguna predictividad a las empresas, ni en términos de valores, ni en términos de optimización. Esto es esencial para poder planificar y asegurar la sostenibilidad y el suministro continuado a medio y largo plazo. Es un sistema que reduce el número de proveedores, y ello tiene un impacto directo en riesgos de abastecimiento. Es un sistema que podría causar deterioro en problemas de abastecimiento, en cadenas de suministro, que impactaría sobre todo el regido industrial", ha proclamado Fábregas sobre la polémica medida.
AESEG ya se había mostrado en contra del texto, aprobado en la primera vuelta por el Consejo de Ministros, en un documento firmado junto con la Asociación Española de Medicamentos Biosimilares (BIOSIM), el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), la Asociación Nacional de la Industria Farmacéutica (Farmaindustria) y la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (FEDIFAR).
Las cinco entidades consideran que el documento provocaría un "serio deterioro" de los problemas de abastecimiento, impactaría "muy negativamente" en el tejido industrial farmacéutico y además supondría una reducción del número de farmacias, todo ello procedente de la regulación de los precios de los medicamentos fuera de patente en España, el denominado sistema de precios seleccionados que forma parte del anteproyecto.