MADRID, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La farmacéutica Celgene y Bluebird Bio han dado a conocer datos actualizados de un estudio en fase I con su terapia experimental de células T con receptores de antígenos quiméricos (CAR-T), conocida como 'bb2121', frente al mieloma múltiple en recaída y refractario, en el marco del Congreso de la Sociedad Americana de Hematología (ASH, en sus siglas en inglés) celebrado en Atlanta (Estados Unidos).
El objetivo de este trabajo era evaluar la seguridad y eficacia de esta terapia, que actúa contra receptores de antígenos quiméricos específicos del antígeno de maduración de células b (BCMA), y determinar una dosis recomendada en la fase II.
"Creemos que la terapia bb2121 tiene el potencial necesario para aportar un impacto significativo en el enfoque y los resultados del tratamiento en estos pacientes", ha destacado el presidente de la Unidad de Hematología y Oncología de Celgene, Nadim Ahmed.
Los 21 pacientes incluidos en el estudio fueron pretratados con una media de siete terapias previas (en un rango de 3 y 14), y todos tuvieron, al menos, un trasplante de células madre autólogas previo.
Los pacientes recibieron un régimen de acondicionamiento de ciclofosfamida y fludarabina, seguido de una infusión de células anti-BCMA CAR-T bb2121, que fueron producidas a partir de las células sanguíneas de cada paciente, las cuales fueron modificadas usando un vector lentiviral propietario que codificaba la célula CAR-T anti-BCMA.
De este modo, tras un seguimiento medio de 40 semanas vieron que 17 de cada 18 pacientes (94%) tratados con dosis activas (150x106, 450x106 y 800x106) lograron una respuesta objetiva, y 16 (89%) lograron al menos una respuesta parcial muy buena (VGPR). El porcentaje de respuestas completas fue del 56 por ciento, mientras que 9 de cada 10 pacientes que fueron evaluables de enfermedad residual mínima (DRM) resultaron ser DRM-negativos.
Además, no se alcanzó la supervivencia libre de progresión en las cohortes de dosis activas, que fue del 81 y 71 por ciento a los 6 y 9 meses respectivamente.
Y en la fase de escalada de dosis, 15 de 21 pacientes (71%) tuvieron síndrome de liberación de citoquinas (SLC), mayormente de grado 1 y 2, con 2 pacientes experimentando SLC de grado 3 (9%). Cuatro pacientes recibieron tocilizumab, 1 (SLC de segundo grado) recibieron esteroides y, en cada caso, el SLC se resolvió en 24 horas. Las citopenias más comunes de grado 3-4 en 21 pacientes infundidos fueron citopenias comúnmente asociadas con quimioterapia linfodepletiva, incluyendo neutropenia (86%), anemia (57%) y trombocitopenia (43%).
Sin embargo, se produjeron dos muertes en las cohortes activas a las 22 y 69 semanas después de la infusión, respectivamente. El primero se debió a un paro cardiaco y el segundo al síndrome mielodisplásico; ambos pacientes tuvieron una respuesta completa del mieloma en su última evaluación del estudio antes de morir.