MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Centro Oncológico Integral Lineberger de la Universidad de Carolina del Norte (UNC), en Estados Unidos, y sus colegas han descubierto que medir la activación de las células B del sistema inmunitario puede ser mejor que medir la activación de las células T o el número total de células inmunitarias dentro y alrededor de un tumor, denominadas linfocitos infiltrantes de tumores (LIT), para predecir si el cáncer de mama HER2-positivo responde al tratamiento, según publican en la revista 'JAMA Oncology'.
Comprender por qué los cánceres responden, o no, a la terapia es crucial para un tratamiento eficaz y personalizado. En el cáncer de mama HER2-positivo, el sistema inmunitario es clave para la eficacia de la respuesta a los fármacos anti-HER2. Entre las células importantes del sistema inmunitario del organismo se encuentran las células B, que crean anticuerpos que neutralizan las células cancerosas y las infecciones, así como las células T, que combaten directamente los cánceres y las infecciones.
Los investigadores combinaron los resultados de dos grandes ensayos clínicos, CALGB 40601 y PAMELA, para analizar diferentes medidas de activación del sistema inmunitario. Seis firmas de activación génica de células inmunitarias procedentes de linfocitos B permitieron predecir mejor si los fármacos eliminarían completamente el tumor que la medición del número de células inmunitarias en un portaobjetos de microscopio. Estos resultados podrían permitir a los médicos ser más precisos a la hora de elegir qué fármacos, y cuántos, utilizar en el tratamiento del cáncer de mama HER2-positivo.
"Cuando hay células inmunitarias activas circulando alrededor de un tumor, el cáncer tiende a ser más fácil de tratar y curar --afirma Lisa A. Carey, subdirectora de ciencia clínica y Profesora Distinguida L. Richardson y Marilyn Jacobs Preyer en Investigación del Cáncer de Mama en UNC Lineberger y autora correspondiente del estudio--. Esto es importante porque determinar la actividad de las células inmunitarias puede permitirnos identificar qué mujeres con cáncer de mama HER2-positivo obtendrán buenos resultados con la terapia estándar, o incluso minimizada".
Los dos ensayos se centraron en el cáncer de mama HER2-positivo, una forma de la enfermedad en la que la proteína del receptor 2 del factor de crecimiento epidérmico humano (HER2) se sobreexpresa en la superficie de las células mamarias. Este tipo de cáncer de mama suele tratarse con trastuzumab (Herceptin), un fármaco dirigido contra la proteína HER2.
Las 305 pacientes incluidas en el estudio CALGB 40601 recibieron paclitaxel (un fármaco de quimioterapia estándar) y trastuzumab, así como lapatinib (Tykerb), un inhibidor que bloquea la acción de HER2, o una combinación de ambos durante 16 semanas. Las 151 pacientes de PAMELA recibieron trastuzumab y lapatinib durante 18 semanas. En ambos ensayos, las pacientes pasaron después a cirugía para extirpar sus tumores.
Mientras que los LIT se asociaron a la eliminación de los cánceres de mama en los ensayos, seis de las siete firmas inmunitarias de células B se asociaron más fuertemente a tasas de eliminación más elevadas. Las seis firmas de células B también se asociaron a una mayor supervivencia, mientras que los LIT no predijeron eficazmente los resultados de supervivencia.
Este hallazgo puede tener aplicabilidad más allá de los cánceres de mama HER2-positivos. "Sabemos que los cánceres de mama tienen características moleculares distintas con bases biológicas y resultados diferentes. En este sentido, necesitamos herramientas de biomarcadores para guiar la intensificación y la reducción del tratamiento en muchos tipos de cáncer de mama, en particular los cánceres de mama HER2-positivo y triple negativo, que pueden ser difíciles de tratar", afirma Charles Perou, Catedrático Distinguido de Oncología Molecular May Goldman Shaw, codirector del Programa de Investigación del Cáncer de Mama Lineberger de la UNC y otro de los autores de este estudio.
"Algunos de nuestros estudios anteriores ya han demostrado la capacidad pronóstica y predictiva de las firmas relacionadas con las células B en los cánceres de mama triple negativos --prosigue--. No nos sorprendería que un análisis similar en cáncer de mama triple negativo encontrara los mismos resultados que los de este estudio actual en cánceres HER2 positivos".
Por su parte, Aranzazu Fernández-Martínez, primera autora del artículo e investigadora asociada en el laboratorio de Perou, señala que los investigadores han creado una base de datos grande e integrada que combina la expresión génica y los datos clínicos, incluyendo la respuesta a la terapia y los resultados de supervivencia de más de 1.000 mujeres que participan en ensayos clínicos.
"El análisis de estos datos proporcionará información esencial para el desarrollo de biomarcadores y la medicina de precisión en el cáncer de mama HER2+, e informará a los médicos de cuándo una persona puede necesitar más o menos quimioterapia, y más o menos fármacos contra el HER2", afirma.