MADRID, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
La colchicina, un fármaco antiinflamatorio barato utilizado normalmente para tratar la gota, no disminuye la gravedad de la COVID-19 ni evita el riesgo de muerte por la infección en pacientes hospitalizados, según un análisis conjunto de las pruebas disponibles, publicado en la revista de acceso abierto 'RMD Open'. Además se asocia a un alto riesgo de efectos secundarios, en particular la diarrea.
Los primeros estudios observacionales sugirieron que la colchicina podría ser un complemento útil a los tratamientos disponibles para la infección por COVID-19, y ya se ha introducido en la práctica clínica en algunos lugares.
En un intento de aclarar su seguridad y eficacia, los investigadores rastrearon las bases de datos de investigación en busca de datos relevantes de ensayos clínicos comparativos sobre el uso del fármaco para el tratamiento de la infección por COVID-19, publicados hasta julio de 2021.
Los investigadores querían averiguar si la colchicina reducía el riesgo de muerte, la necesidad de asistencia respiratoria, el ingreso en cuidados intensivos y la duración de la estancia hospitalaria; y si su uso se asociaba a algún efecto secundario concreto.
Aplicaron el enfoque de Grados de Recomendación, Valoración, Desarrollo y Evaluación (GRADE) para evaluar la calidad de la evidencia para cada uno de estos resultados. Se excluyeron los estudios observacionales, los estudios de laboratorio, los estudios con animales y los estudios con menos de 10 participantes.
De los 69 textos completos evaluados, se incluyeron en el análisis de datos agrupados 6 ensayos controlados aleatorios con 16.148 pacientes con diferentes grados de gravedad de la COVID-19.
Esto demostró que no hubo una reducción significativa del riesgo de muerte (6 estudios), la necesidad de asistencia respiratoria (5 estudios), el ingreso en cuidados intensivos (3 estudios), la duración de la estancia hospitalaria (4 estudios) o los efectos secundarios graves (3 estudios) entre los pacientes tratados con colchicina y los que recibieron sólo los cuidados de apoyo habituales.
Los pacientes que tomaron colchicina también tuvieron un 58% más de tasas de efectos secundarios y casi el doble de riesgo de diarrea que los que recibieron cuidados de apoyo. La calidad GRADE de la evidencia fue moderada para la mayoría de los resultados estudiados.
Los investigadores advierten de que estos hallazgos sobre la colchicina "deben interpretarse con cautela debido a la inclusión de ensayos clínicos aleatorios de etiqueta abierta. El análisis de los resultados de eficacia y seguridad se basa en un pequeño número de ensayos controlados aleatorios en intervenciones de control".
Pero concluyen que "la colchicina no reduce el riesgo de mortalidad, la necesidad de soporte ventilatorio, el ingreso en la unidad de cuidados intensivos o la duración de la estancia hospitalaria entre los pacientes con COVID-19. No hay ningún beneficio adicional de añadir colchicina a los cuidados de apoyo en el tratamiento de los pacientes con COVID-19", remachan.