MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Instituto Nacional de Sanidad de Estados Unidos (NIH) ha anunciado este sábado la suspensión de un ensayo clínico sobre la efectividad de la hidroxicloroquina en pacietnes de coronavirus tras comprobar su nulo efecto en los mismos. La hidroxicloroquina es un potente antipalúdico que provoca riesgo de accidentes cardiacos defendido públicamente por el presidente Donald Trump, quien llegó a decir que lo tomaba de forma preventiva.
"La Junta de Vigilancia de Datos y Seguridad se reunió a última hora del viernes y determinó que aunque no había daño, es muy poco probable que el estudio sea beneficioso para los pacientes hospitalizados con COVID-19", ha explicado el NIH en un comunicado.
El ensayo incluía a más de 470 adultos ingresados con coroanvirus, pero el estudio revela que ninguno de los pacientes a los que se les suministró el medicamento mostró mejoría alguna con respecto a los del grupo de control a los que se suministró un placebo.
El lunes la Administración sobre Alimentación y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) anunció la suspensión de la autorización de emergencia emitida para el uso de hidroxicloroquina en pacientes de coronavirus.
"A la vista de los graves accidentes cardiacos y de los demás efectos colaterales graves, los beneficios conocidos y potenciales de la cloroquina y de la hidroxicloroquina no superan a los riesgos conocidos y potenciales de su uso autorizado", apuntó la FDA en un comunicado.
En concreto, la FDA cita los resultados de un estudio clínico en pacientes COVID-19 hospitalizados que "demuestra que la hidroxicloroquina no ha tenido ningún efecto positivo en la mortalidad ni en la aceleración de la recuperación".
El uso de este medicamento inicialmente desarrollado contra la malaria fue autorizado en marzo para pacientes ingresados en hospital con COVID-19, la enfermedad provocada por el coronavirus. En abril la FDA ya aconsejó a los médicos que no recetaran la hidroxicloroquina a los pacientes que no cumplieran esa premisa.
En marzo y abril, Trump defendió el uso de la hidroxicloroquina como tratamiento contra el coronavirus. Entonces, destacó que los pacientes "no tienen nada que perder" tomando esa medicina e incluso sugirió su uso de forma preventiva. El 18 de mayo anunció por sorpresa en rueda de prensa que estaba tomando el medicamento de forma preventiva.