MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
Neratinib, un medicamento aún no aprobado en Europa, tras la adyuvancia con trastuzumab, mejora al año la supervivencia libre de enfermedad invasiva en pacientes intervenidas quirúrgicamente de tumores de mama con amplificación de HER2, según el ensayo 'ExteNET' dado a conocer durante el Scientific Outreach, organizado por la Fundación SOLTI bajo el título 'Avances en Oncología: opciones terapéuticas de vanguardia para el cáncer de mama HER2+'.
Según los resultados observados, las pacientes que completaron un año de neratinib tras la adyuvancia con trastuzumab presentan una mayor supervivencia libre de enfermedad invasiva. "Y este beneficio parece ser especialmente importante en pacientes intervenidas de tumores con receptores hormonales positivos", ha explicado la oncóloga del Hospital Germans Trias i Pujol (ICO-Badalona), Mireia Margelí.
A pesar de estos resultados, la doctora ha destacado la importancia de evaluar individualmente a cada paciente, comentar con ellas los resultados de los ensayos clínicos y evaluar los riesgos y beneficios que aporta este tratamiento en cada caso.
Asimismo, en el escenario adyuvante, es decir, los tratamientos que se administran a las pacientes antes de la cirugía, la miembro de la Junta Directiva de SOLTI y jefa de la Unidad de Mama del Servicio de Oncología del Hospital Vall d'Hebron, Cristina Saura, ha comentado los resultados del estudio 'APHINITY', con participación de SOLTI, que fueron presentados en el congreso de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés), en junio de este año.
Hasta ahora, el tratamiento incluía quimioterapia asociada a un anticuerpo monoclonal, trastuzumab. "El estudio ha evaluado positivamente la eficacia de añadir un segundo anticuerpo, pertuzumab, a la combinación de quimioterapia y trastuzumab, y se ha podido observar que incorporar este segundo fármaco mejoraría el pronóstico de las pacientes", ha recalcado Saura.
De momento, prosigue, este anticuerpo está pendiente de su aprobación en adyuvancia por parte de las agencias reguladoras, si bien la especialista de SOLTI ha asegurado que será una herramienta más de las que hasta ahora se dispone para prevenir recaídas en las pacientes.
Respecto a la quimioterapia, Saura ha recordado que este tratamiento sigue teniendo un importante papel para ciertas pacientes con tumores grandes o agresivos. "Pero estamos aprendiendo cada vez más, a través de diferentes estudios, que hay un perfil de pacientes con tumores pequeños o muy dependientes de HER2 que quizás podrían ahorrarse la quimioterapia", ha puntualizado.
En definitiva, como han subrayado los ponentes a lo largo de la jornada, las pacientes con cáncer de mama HER2+ cuentan cada vez con un abanico más amplio de opciones terapéuticas. No obstante, han avisado de que el reto para sus oncólogos es ofrecer a cada una de ellas el tratamiento que más le convenga, en función del perfil de eficacia y seguridad de cada medicamento.
Los oncólogos tampoco son ajenos a la llegada de nuevos productos biosimilares, equivalentes en seguridad y eficacia a los productos biológicos de referencia que contribuirán a reducir el coste global del tratamiento antitumoral. De hecho, existen ya biosimilares en desarrollo cuya aprobación se espera en los próximos meses.
"La aplicación de biosimilares dependerá de los datos clínicos disponibles, lo que en la práctica supondrá una nueva opción para ampliar las posibilidades de las que disponemos en las estrategias terapéuticas de nuestras pacientes", ha zanjado Margelí.