MADRID 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
España ha conseguido situarse entre los seis países de Europa - junto a Alemania, Bélgica, Francia, Italia y Hungría - donde el tiempo de inicio de un ensayo clínico en investigación oncológica es más breve, concretamente sólo pasan 139 días entre que se presenta la documentación hasta que se recluta al primer paciente, según datos del Proyecto BEST.
Esta ha sido una de las principales conclusiones de la jornada de la Iniciativa de Medicamentos Innovadores europea (IMI), celebrada este jueves en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) en la que participó, entre otros, Javier Urzay, subdirector general de Farmaindustria.
En el encuentro, organizado por Farmaindustria junto con el propio CNIO, el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), el Centro para el Desarrollo Económico e Industrial (CDTI) y la Asociación Española de Bioempresas (ASEBIO), entre otras, los expertos ha recordado que las compañías farmacéuticas innovadoras con presencia en España han promovido desde 2004 más de 6.000 ensayos clínicos, de los que más de 2.700 se han desarrollado en marco del Proyecto BEST.
En su intervención, Urzay ha recordado que la industria farmacéutica innovadora invirtió 1.004 millones de euros en proyectos de investigación y desarrollo durante 2015, de los que el 40 por ciento se destina a ensayos clínicos e investigación básica en colaboración con centros de investigación y hospitales de toda España, así como de tres grupos cooperativos de investigación clínica independiente en el ámbito de la oncología.
"Al mismo tiempo, más de 50 compañías farmacéuticas, nacionales y multinacionales, llevan a cabo actividades de investigación en España y forman parte de la Plataforma Tecnológica Española de Medicamentos Innovadores, desarrollando programas de ámbito estatal para poner en marcha nuevos ensayos clínicos y establecer vías de colaboración con compañías biotecnológicas startup, con excelentes resultados", ha añadido.
Asimismo, ha destacado los esfuerzos del sector farmacéutico innovador de cara a reducir los plazos para la puesta en marcha de ensayos clínicos, mejorar las tasas de reclutamiento de pacientes y, gracias a la excelencia de los profesionales sanitarios del Sistema Nacional de Salud, "mantener a España como uno de los mejores países del mundo para desarrollar investigación clínica".
A su juicio, la iniciativa europea IMI constituye "una oportunidad para consolidar este liderazgo, no sólo por los recursos económicos, sino porque permite reforzar la colaboración entre todos los agentes implicados (industria, autoridades sanitarias, reguladores, asociaciones de pacientes, universidad y hospitales).