MADRID 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
Después de escasos avances en el tratamiento del mesotelioma en las dos últimas décadas, los resultados del ensayo de fase 2 de PrE0505 proporcionan una estrategia novedosa para prolongar la supervivencia, según publican los investigadores en la revista 'Nature Medicine'.
Los resultados aportan información adicional sobre los métodos de selección de pacientes para este régimen de quimioinmunoterapia, que también se está evaluando en el ensayo de fase 3 de DREAM3R, abierto a pacientes de Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda.
El mesotelioma pleural es una forma rara y agresiva de cáncer con un mal pronóstico y limitadas opciones de tratamiento. Históricamente, la tasa de supervivencia a cinco años es inferior al 10%. La mayoría de estos cánceres están causados por la exposición al amianto y la consiguiente inflamación crónica en la pleura, una fina capa de tejido que recubre los pulmones y reviste la pared interior de la cavidad torácica.
El estudio evaluó la adición de la inmunoterapia con durvalumab a la quimioterapia estándar en pacientes con mesotelioma pleural maligno (MPM), un cáncer de los tejidos que recubren los pulmones, no tratado previamente y no operable. El ensayo cumplió su objetivo primario con una mediana de supervivencia global de 20,4 meses, significativamente más larga que los 12 meses con el control histórico. En el caso de los pacientes con tumores epitelioides, el subtipo más común de MPM, la mediana de supervivencia global fue de 24,3 meses.
"La inmunoterapia con durvalumab y la quimioterapia a base de platino tienen una actividad clínica prometedora en pacientes con mesotelioma pleural maligno (MPM), y las respuestas parecen estar impulsadas por los antecedentes genómicos de la enfermedad --afirma el doctor Peter J. O'Dwyer, director general y presidente de PrECOG--. En el ensayo de fase 2 de PrE0505, la supervivencia de los pacientes con MPM epitelioide superó los dos años, y algunos de estos pacientes siguen sin progresión del tumor en la actualidad".
El estudio multicéntrico PrE0505 (NCT02899195) se llevó a cabo en 20 centros oncológicos universitarios y hospitales comunitarios de todo Estados Unidos con el doctor Patrick Forde (Universidad Johns Hopkins) como investigador principal. Participaron 55 pacientes con MPM no tratados previamente que recibieron una dosis fija de inmunoterapia con durvalumab por vía intravenosa una vez cada tres semanas, en combinación con quimioterapia (pemetrexed y cisplatino o carboplatino) durante un máximo de seis ciclos.
"Los resultados del PrE0505 proporcionan una estrategia novedosa para prolongar la supervivencia --resalta el doctor Suresh S. Ramalingam, autor principal del estudio y director ejecutivo del Instituto Oncológico Winship de la Universidad Emory de Atlanta--. Además, los estudios traslacionales en profundidad llevados a cabo junto con el ensayo clínico por el equipo del PrECOG proporcionan información adicional sobre los métodos de selección de pacientes para este novedoso régimen".
La mediana de seguimiento del estudio fue de 24,2 meses. El criterio de valoración principal fue la supervivencia global. Los porcentajes estimados de pacientes vivos fueron del 87% a los seis meses, del 70% a los 12 meses y del 44% a los 24 meses.
La tasa de respuesta objetiva (ORR), un criterio de valoración secundario, fue del 56,4%. La tasa de respuesta objetiva se define como el porcentaje de pacientes en los que el tratamiento provoca una reducción significativa del tumor.
Los acontecimientos adversos notificados con mayor frecuencia fueron predominantemente de bajo grado e incluyeron fatiga, náuseas y anemia. Todos los pacientes del estudio recibieron al menos un ciclo de durvalumab con quimioterapia; 48 pacientes (87%) completaron seis ciclos.
Se observaron diferencias según el subtipo histológico de los tumores MPM. Los pacientes con tumores del subtipo epitelioide tuvieron una ORR más alta que aquellos con tumores no epitelioides (66% frente a 29%). Asimismo, los pacientes con MPM epitelioide tuvieron una supervivencia global más larga que los que tenían MPM no epitelioide (24,3 meses frente a 9,2 meses), así como una supervivencia libre de progresión significativamente mayor (8,2 meses frente a 4,9 meses).
El análisis genómico de los datos del PrE0505, dirigido por la doctora Valsamo (Elsa) Anagnostou y sus colegas del Centro Oncológico Johns Hopkins Kimmel y del Instituto Bloomberg-Kimmel de Inmunoterapia contra el Cáncer en Baltimore, revela que los tumores MPM con una alta carga de mutaciones inmunogénicas respondieron favorablemente a la quimioinmunoterapia, especialmente en el grupo epitelioide.
Además de los cambios en la secuencia del material genético de las células cancerosas, los cambios estructurales en todo el genoma y una firma de deficiencia de recombinación homóloga (que indica defectos en los mecanismos de reparación del ADN dañado en las células cancerosas) fueron más pronunciados en los tumores que respondieron.
Los pacientes con mutaciones deletéreas en la línea germinal de los genes que predisponen al cáncer, incluidos, entre otros, los genes que intervienen en la reparación del daño en el ADN, tuvieron una supervivencia libre de progresión y global significativamente mayor con la quimioinmunoterapia.
Al observar el microambiente tumoral (que comprende las células normales y los vasos sanguíneos que rodean el tumor, contiene células inmunitarias y puede afectar al crecimiento y la propagación de las células cancerosas), los tumores que respondieron a la terapia estaban rodeados por una mayor variedad de una población específica de células inmunitarias, llamadas células T.