MADRID, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
GSK ha impulsado el Instituto Nacional de Anemia Renal (INAR), que tiene como objetivo reunir a profesionales sanitarios involucrados en el manejo de la anemia asociada a la Enfermedad Renal Crónica (ERC) para mejorar su abordaje y concienciar sobre esta patología.
El primer encuentro de INAR, celebrado el 1 de junio, ha concentrado a nefrólogos, cardiólogos, médicos de Medicina Interna, geriatras y Atención Primaria, entre otros, para poner en común ideas y actividades con el fin de mejorar la calidad de vida de los pacientes con anemia renal.
La ERC es un importante problema de salud pública a nivel mundial que afecta a más del 10 por ciento de la población española. Se asocia a una elevada comorbilidad, así como a un gran consumo de recursos en el sistema sanitario.
La anemia es una complicación frecuente de la enfermedad renal crónica y se asocia a una disminución en la calidad de vida en el día a día de los pacientes que viven con ella. "En España, debido a la falta de concienciación y conocimiento acerca de esta patología tanto a nivel social como en el ámbito sanitario, todavía existe un importante margen de mejora para la optimización del abordaje terapéutico de la anemia", aseguran desde GSK en un comunicado.
Esta iniciativa involucra a todos los agentes implicados (pacientes, distintos médicos especialistas, farmacia hospitalaria y enfermería) para conseguir una mejora en el manejo de estos pacientes y del abordaje de la patología.
"La enfermedad renal crónica es una patología muy prevalente en la sociedad. Se calcula que hasta un 15 por ciento de la población española vive con ella, y la presencia de anemia es frecuente en los pacientes renales. Los objetivos prioritarios del Instituto son dar a conocer su prevalencia, contribuir a incrementar su diagnóstico y sus implicaciones clínicas, así como conseguir una adecuada remisión al nefrólogo para su correcto tratamiento. Además de promover la investigación sobre aspectos relacionados con la anemia renal", ha comentado el doctor Aleix Cases, consultor senior del servicio de Nefrología del Hospital Clínic de Barcelona.
"Queremos tener una visión 360 de la ruta del paciente con anemia renal, definir los objetivos y el mejor manejo posible de una forma integrada. Así como de las consecuencias de la anemia sobre distintos elementos de la patología cardiovascular, progresión de enfermedad renal o la calidad de vida, entre otras", ha detallado el jefe del Servicio de Nefrología del Hospital Puerta de Hierro de Madrid, José María Portolés.
Además, la Federación Nacional de Asociaciones para la lucha contra las enfermedades del riñón (Federación ALCER) también está representada en este grupo de trabajo.
"Queremos poner al paciente en el centro del proceso. Nos interesa su punto de vista, conocer qué es lo que más valora más allá de los niveles de hemoglobina que definen su anemia, que participe en la elección de su tratamiento y que nos adaptemos a sus necesidades", ha concluido María Portolés.