MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
Baxter ha anunciado una nueva indicación de uso obtenida a nivel europeo para su sellante hemostático 'Hemopatch', un parche suave, fino, plegable, flexible y de colágeno reabsorbible que se aplica en diferentes tipos de cirugías, entre ellas, generales, torácicas, cardiovasculares, de columna y neurocirugías.
"Este nuevo avance de nuestro producto 'Hemopatch' del área de hemostáticos y sellantes de Biocirugía, pone de manifiesto la innovación constante de Baxter en este campo. Nuestro fin es mejorar en la atención de las necesidades de nuestros clientes y pacientes, ofreciendo herramientas novedosas, eficaces y seguras a los profesionales sanitarios para el desarrollo de su trabajo en distintos tipos de cirugías", ha aseverado el director general de Baxter, Stefan Kuntze.
En concreto, la generación de parches se aplica y controla "fácilmente" en el sitio donde se desea conseguir la hemostasia/sellado, gracias a su estructura flexible. Su funcionamiento consiste en la interacción de dos componentes que son capaces de crear una hemostasia rápida y duradera, mediante el sellado de la superficie de la hemorragia.
APLICACIONES DE USO
Y es que, en contacto con la sangre, el colágeno induce la agregación plaquetaria, mientras que las plaquetas se depositan en grandes cantidades sobre la estructura de colágeno, permitiendo la formación de fibrina. La estructura del parche proporciona una matriz tridimensional que absorbe los líquidos y ofrece un fortalecimiento mecánico adicional del coágulo.
De hecho, la capa que se aplica sobre el tejido está cubierta con una capa fina de NHS-PEG que, cuando entra en contacto con la sangre u otros líquidos corporales, forma un hidrogel que mejora sus propiedades de adherencia y sella la superficie del tejido.
Sus indicaciones de uso van desde dispositivo hemostático y sellante quirúrgico para procedimientos en los que el control de la hemorragia o la fuga de otros líquidos corporales o aire mediante técnicas quirúrgicas convencionales son ineficaces o poco prácticos, hasta para cerrar los defectos de la duramadre (una de las meninges adheridas a la pared craneal) tras la lesión traumática, escisión, retracción o encogimiento de la misma, convirtiéndose de esta manera en un parche quirúrgico con triple indicación.