MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
De los cuatro tratamientos indicados para la Covid-19
y aprobados por la Agencia Americana del Medicamento (FDA) para uso de emergencia, dos han contado con la participación de Lilly, lo que para ellos supone "un gran orgullo" en la medida en que, a corto y medio plazo, se necesitan fármacos eficaces hasta alcanzar un alto porcentaje de inmunidad con la vacuna.
"La vacunación es la gran esperanza para vencer la enfermedad, pero hasta que ese momento llegue, se precisarán tratamientos eficaces en los pacientes que se contagien", ha afirmado el director médico de Lilly España, el doctor José Antonio Sacristán, quien ha recordado que el porcentaje de la inmunidad de rebaño se sitúa entre el 60 y el 75 por ciento, "muy lejos del 15 por ciento actual".
Asimismo, el director de Lilly también ha señalado que la mejor forma de demostrar la eficacia de una intervención terapéutica es mediante ensayos clínicos aleatorizados, "como los dos que han servido de base para la autorización del uso de emergencia por la FDA".
De esta manera, Sacristán ha contado que en marzo y mayo surgieron las alianzas con AbCellera y Junshi BioSciences, respectivamente, que han permitido el desarrollo clínico de dos anticuerpos neutralizantes, bamlanivimab y etesivimab.
Esta colaboración culminó con la autorización de uso de emergencia para la COVID-19 por parte de la FDA de uno de estos anticuerpos (bamlanivimab) y de uno de los fármacos ya comercializados (baricitinib), indicado para la artritis reumatoide. "Aumentar el número de alternativas terapéuticas para los pacientes con COVID-19 en distintas fases de la enfermedad y haberlo logrado en un tiempo tan corto, de menos de 9 meses, supone un gran orgullo", ha abundado Sacristán.
Concretamente, la FDA autorizó el 9 de noviembre el uso de emergencia del anticuerpo neutralizante bamlanivimab, indicado para el tratamiento de pacientes con COVID-19 de leve a moderado y alto riesgo de progresar a estadios más graves y/o de ser hospitalizados. Unos días más tarde, el 19 de noviembre, se aprobó baricitinib, un inhibidor de JAK, que recibió esta autorización para su uso en combinación con remdesivir, otro de los cuatro fármacos aprobados, en pacientes hospitalizados con COVID-19 que precisan de oxígeno suplementario.
PROGRAMA DE INVESTIGACIÓN DE LILLY
El programa de investigación de Lilly incluye una variedad de ensayos clínicos que abarca un amplio rango de usos potenciales en las distintas fases de la enfermedad, estudiando además su administración, tanto en monoterapia como en combinación con otros tratamientos, con el objetivo de lograr el máximo beneficio para los pacientes con coronavirus. En este sentido, Sacristán ha recordado que Lilly nunca se había dedicado a las enfermedades infecciosas.
Actualmente, esta farmacéutica tiene en marcha varios ensayos clínicos con anticuerpos neutralizantes. Por un lado, BLAZE-1 ha sido la base para la autorización de uso de emergencia de la FDA para bamlanivimab en pacientes con COVID-19 de leve a moderado y riesgo de progresar a estadios más graves. Este ensayo tiene otra rama de tratamiento que ha evaluado la eficacia de combinar bamlanivimab con otro anticuerpo de Lilly, etesevimab.
Por otro lado, el ensayo clínico BLAZE-2 investiga la eficacia de bamlanivimab para la prevención de la COVID-19 en residentes y personal en centros de asistencia de larga estancia, y el ensayo ACTIV-2, promovido por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos (NIAID), evalúa la eficacia de bamlanivimab en pacientes ambulatorios con COVID-19 y síntomas de leves a moderados.
En el caso de baricitinib, la autorización de la FDA se basó en los resultados del estudio ACTT-2, un ensayo clínico promovido también por el NIAID, del Instituto Nacional de Salud (NIH) de Estados Unidos, realizado con el apoyo de Lilly, en el que se demostró que la combinación baricitinib-remdesivir reducía el tiempo de recuperación y el estado clínico de los pacientes, respecto a los pacientes tratados solo con remdesivir.
Además, Lilly ha promovido el ensayo clínico COV-Barrier, que evalúa la eficacia y seguridad de la adición de baricitinib al estándar de tratamiento en los pacientes hospitalizados por COVID-19, cuyos resultados se presentarán en las próximas semanas.
Asimismo, aparte de los ensayos clínicos, se han realizado numerosos estudios independientes con baricitinib. Al respecto, destacan dos estudios observacionales realizados en el Complejo Hospitalario General de Albacete, publicados en revistas de alto impacto, y el ensayo clínico PanCOVID, aún en marcha, promovido por el Instituto de Salud Carlos III, que evalúa la eficacia de varios tratamientos, entre ellos baricitinib, y en el que participan más de 50 centros españoles.
Por su parte, el presidente de Lilly España, Nabil Daoudha, ha afirmado que, desde Lilly, quieren contribuir a darle valor a la ciencia. "Tenemos la esperanza de que, como sociedad, nos volvamos a enamorar de los químicos, biólogos y médicos, entre otros profesionales, porque nos van a poder devolver una vida más normal", ha señalado. Daoudha ha culminado su intervención expresando su deseo de que "el I+D recupere su peso específico en los presupuestos, no solo en los públicos, sino también en los privados", y de que se potencie la colaboración público-privada. Para ello, tal y como ha manifestado, es necesario que la inversión farmacéutica no se vea como un gasto.