MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio llevado a cabo en España con más de 800 pacientes del Hospital del Mar de Barcelona ingresados durante la primera ola de la pandemia de COVID-19 ha evidenciado que el empleo de calcifediol, junto con la mejor terapia disponible, disminuyó significativamente el riesgo de ingreso en UCI y de muerte por coronavirus.
La investigación, publicada en la revista 'The Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism (JCEM)', muestra que el tratamiento con calcifediol administrado poco después de la hospitalización redujo notablemente el requerimiento para el ingreso en la UCI y disminuyó la mortalidad en más del 50 por ciento.
El tratamiento con calcifediol desde el ingreso en el hospital redujo en un 87 por ciento el riesgo de ingreso en UCI. En el mismo estudio, se analizaron los valores séricos de 25(OH) vitamina D, observándose cómo los pacientes que tenían valores de referencia adecuados (=20ng/ml) tenían un 70 por ciento menos de riesgo de ingreso en la UCI que aquellos pacientes con valores deficitarios de 25(OHD).
De los 838 pacientes que participaron en el estudio, 447 recibieron calcifediol junto con la mejor terapia disponible en el momento del ingreso, mientras que 391 recibieron la mejor terapia disponible pero no fueron tratados con calcifediol en ese momento (de estos, 53 pacientes fueron tratados posteriormente durante su ingreso en UCI y fueron asignados en el grupo de los tratados con calcifediol en un segundo análisis).
De los pacientes tratados al ingreso con calcifediol, el 4,5 por ciento requirió ingreso en la UCI frente al 21 por ciento del grupo no tratado. Además, el 4,7 por ciento de los pacientes tratados con calcifediol al ingreso fallecieron en comparación con el 15,9 por ciento de los no tratados.
Según los autores, el uso de calcifediol para este ensayo fue seleccionado frente al de colecalciferol debido a su excelente perfil farmacocinético, incluyendo una alta capacidad de absorción intestinal (cercana al 100 por ciento), a su capacidad de aumentar rápidamente los valores séricos de 25(OH) vitamina D, y una larga vida media. Adicionalmente, calcifediol no requiere de hidroxilación hepática, la cual se ve muchas veces alterada en pacientes graves.
"Calcifediol se ha posicionado como un tratamiento potencial capaz de reducir la severidad de la COVID-19. En este estudio realizado durante el primer brote europeo del COVID-19 entre marzo y mayo de 2020, hemos observado que, en pacientes hospitalizados, el tratamiento con calcifediol redujo el riesgo de necesidad de cuidados intensivos en más del 80 por ciento. Existen buenas razones para postular que calcifediol, prohormona del sistema endocrino de la vitamina D, puede tener efectos beneficiosos en diferentes etapas de las infecciones por COVID-19, como la infección viral temprana (por mecanismos efectores antivirales de la inmunidad innata) y su fase hiperinflamatoria posterior. Además, puede tener un papel modulador clave para las respuestas al síndrome de dificultad respiratoria aguda al disminuir la tormenta de citoquinas, reduciendo el aumento de la coagulabilidad y la tendencia protrombótica asociada al COVID-19 más grave. La regulación del sistema renina-angiotensina-bradiquinina que parece conseguir el tratamiento con calcifediol tiene, del mismo modo, una especial relevancia para mitigar la progresión de la COVID-19", explica uno de los autores del estudio, el doctor José Manuel Quesada, especialista en Endocrinología y Nutrición, profesor honorífico de la Universidad de Córdoba.
RESULTADOS QUE REFUERZAN LOS YA PUBLICADOS EN OTROS ESTUDIOS ESPAÑOLES
Los resultados del citado estudio del Hospital del Mar refuerzan los publicados hace unos meses en el ensayo 'Covidiol', promovido por el Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (IMIBIC) y llevado a cabo en el Hospital Reina Sofía de Córdoba (España), en el que el tratamiento con calcifediol condujo a una disminución de los ingresos en UCI y fallecimientos entre los pacientes con COVID-19, mejorando notablemente el pronóstico de esta enfermedad.
En esta línea, la evidencia clínica sugiere que la suplementación para normalizar niveles de 25-OH vitamina D podría reducir el riesgo de infecciones o muertes por SARS-CoV-2 al disminuirse la producción de citoquinas pro-inflamatorias y, de este modo, reduciendo el riesgo de generar una tormenta de citoquinas, la que, finalmente, contribuye al desarrollo del SDRA.
"Los resultados de estos dos estudios desarrollados en nuestro país sugieren que la administración de calcifediol debería ser antes del desarrollo del SDRA, ya que su administración durante el ingreso en UCI no modifica en la misma medida la supervivencia del paciente", comenta el doctor Quesada.