MADRID, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
Médicos del Mundo, Médicos Sin Fronteras, Salud Por Derecho, Just Treatment y otras organizaciones de 17 países se han unido para solicitar que se acabe con el "injustificado monopolio" de Gilead en Europa del fármaco contra la hepatitis C, el sofosbuvir.
Las ONG se han pronunciado así con motivo de la audiencia pública que la Oficina Europea de Patentes (OEP) va a celebrar en Munich (Alemania) los días 13 y 14 de septiembre para abordar el recurso presentado en marzo de 2017 por las organizaciones contra la patente del sofosbuvir.
Y es que, a juicio de las ONG, si la oposición a la patente sale adelante se habrá dado un paso "importante" para permitir la producción e importación de versiones genéricas asequibles de sofosbuvir en Europa. De esta forma, se protegerá a los sistemas de salud de cargas financieras ilegítimas causadas por los abusivos precios que fijan las empresas.
De hecho, tal y como han recordado, los precios "extremadamente altos" en Europa de los nuevos medicamentos contra la hepatitis C (denominados antivirales de acción directa o AAD) han llevado a las organizaciones de la sociedad civil a investigar y, posteriormente, oponerse al monopolio y la legitimidad de tales patentes.
"Durante tres agónicos años he estado esperando para poder recibir el sofosbuvir, un medicamento por vía oral vital contra la hepatitis C", ha explicado la paciente y líder de Just Treatment, Clare Groves,quien superó la hepatitis C tras ser tratada en el Sistema Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés) del Reino Unido.
La Organización Mundial de la Salud calcula que en la región europea hay 15 millones de personas, aproximadamente 1 de cada 50 habitantes, infectadas de forma crónica de hepatitis C, lo que provoca unas 112.500 muertes al año por cáncer de hígado y cirrosis. La llegada de los fármacos AAD, que ofrecen una cura más efectiva, segura y en menos tiempo frente a los tratamientos anteriores, ha supuesto un logro terapéutico en la lucha contra la hepatitis C, con tasas de curación superiores al 90 por ciento, frente al 50 por ciento anterior.
A pesar de que el sofosbuvir es la piedra angular de la mayoría de los tratamientos combinados para la hepatitis C, el acceso universal a estos nuevos tratamientos sigue siendo limitado a causa de los altos precios. Un hecho que, según las organizaciones, obliga a muchos gobiernos y proveedores del tratamiento a racionar la administración del fármaco y limitar el acceso solo a los pacientes con la enfermedad en fase avanzada.
DESAFÍO PARA PAÍSES EUROPEOS DE ALTOS INGRESOS
En este punto, han avisado de que Gilead cobra en Europa hasta 43.000 euros por persona y régimen de tratamiento de 12 semanas, mientras que en países donde no hay patente para el fármaco, la competencia entre los productores de genéricos ha abaratado el precio a solo 52 euros por el mismo ciclo de tratamiento. Además, apostillan, diferentes estudios han demostrado que el coste de fabricación por pastilla diaria es de 0,50 euros.
"Las barreras económicas para acceder a los medicamentos y a la asistencia sanitaria se han convertido en un desafío para los países europeos de altos ingresos. Puesto que la razón por la que los precios son tan elevados son las patentes no justificadas ha llegado la hora de oponerse a las patentes injustas en Europa", ha comentado el director de la Campaña de Médicos del Mundo, Olivier Maguet.
Si bien los precios elevados de los medicamentos son un "problema de sobra conocido en muchas partes del mundo", el reciente incremento de los costes de los AAD ha hecho que Europa preste atención al impacto que tienen los monopolios en los presupuestos sanitarios y en el acceso de las personas a muchos otros medicamentos esenciales.
Concretamente, se han presentado recursos legales contra las patentes de sofosbuvir y otros AAD en varios países, y se ha conseguido que se revoquen las patentes de sofosbuvir en Egipto, China y Ucrania. En otros países, como en Argentina, Brasil, India, Rusia y Tailandia, están pendientes de resolución.
"Cada día, MSF es testigo de primera mano de cómo los monopolios sobre los medicamentos impiden que las personas accedan a medicamentos que salvan vidas. MSF solo pudo ampliar el acceso al tratamiento de hepatitis C en países como Camboya e India una vez que estuvieron disponibles medicamentos genéricos de calidad. Ya es hora de que la Oficina Europea de Patentes y las oficinas de patentes de todo el mundo apliquen un mayor escrutinio cuando conceden monopolios sobre los medicamentos, considerando el impacto negativo que las patentes no justificadas tienen en la salud de las personas", ha dicho la responsable de Políticas de la Campaña de Acceso a medicamentos de MSF, Gaelle Krikorian.
Por tanto, tal y como ha insistido, revocar la patente de Gilead supondría el fin del monopolio de esta empresa en Europa, y permitiría que los países accedieran al sofosbuvir a precios asequibles a través de productores de genéricos. Asimismo, enfatiza, enviaría un mensaje "muy claro" a otros países para que se opongan a las patentes no justificadas cuando lo que está en juego es la salud y supervivencia de las personas.
"La Oficina Europea de Patentes debería revocar esta patente, pero estamos ante un problema de fondo. Los monopolios sobre los medicamentos son la causa de que alcancen precios desorbitados y abusivos, y los gobiernos conceden estos monopolios para tratamientos que se han desarrollado con una parte importante de dinero público. En el caso de sofosbuvir, además, la patente está injustificada desde el punto de vista legal y científico", ha zanjado la directora de Salud por Derecho, Vanessa López.