MADRID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un estudio del Centro de Envejecimiento Robert N. Butler de Columbia en la Escuela de Salud Pública Mailman (Estados Unidos) revela mejoras significativas en la salud de los adultos mayores en Inglaterra en comparación con generaciones anteriores.
Esta investigación, publicada en 'Nature Aging', utilizó un nuevo enfoque que examinó las tendencias en el funcionamiento de las personas: sus capacidades cognitivas, locomotoras, psicológicas y sensoriales.
Aplicando datos del Estudio Longitudinal Inglés sobre el Envejecimiento, el estudio demuestra que los adultos mayores de hoy experimentan niveles más altos de funcionamiento físico y mental que las generaciones anteriores a la misma edad. "Estas mejoras fueron importantes", afirmó el MBBS, PhD, profesor de la cátedra Irene Diamond de Envejecimiento en Política y Gestión de la Salud en el Centro de Envejecimiento Butler Columbia de la Facultad de Salud Pública Mailman de la Universidad de Columbia y autor del estudio, John Beard.
Los investigadores observaron cómo una persona de 68 años nacida en 1950 tenía una capacidad similar a una persona de 62 años nacida una década antes, y los nacidos en 1940 tenían un mejor funcionamiento que los nacidos en 1930 o 1920. "Si hubiéramos comparado a alguien nacido en 1950 con alguien nacido en 1920, probablemente habríamos observado mejoras aún mayores", señala el experto.
Además, Beard y su equipo también realizaron análisis similares en el Estudio Longitudinal de Salud y Jubilación en China (CHARLS) y encontraron tendencias muy parecidas, aunque este análisis estuvo limitado por el período de seguimiento mucho más corto en el estudio chino en comparación con el estudio inglés.
De este modo, el experto afirma que es probable que las mejoras en la educación, la nutrición y el saneamiento a lo largo del siglo XX hayan desempeñado un papel clave. Los avances médicos, como los reemplazos de articulaciones y mejores tratamientos para enfermedades crónicas, también hayan sido factores contribuyentes.
Sin embargo, los investigadores advierten que sus observaciones corresponden a un período específico y a un solo país. Es posible que no se hayan observado las mismas tendencias en Estados Unidos ni en toda la población.
"Nos sorprendió la magnitud de estas mejoras, en particular al comparar a las personas nacidas después de la Segunda Guerra Mundial con los grupos nacidos antes", afirmó Beard. "Pero nada indica que seguiremos viendo las mismas mejoras en el futuro, y cambios como la creciente prevalencia de la obesidad pueden incluso hacer que estas tendencias se reviertan. También es probable que los grupos más favorecidos hayan experimentado mayores avances que otros. Pero en general, las tendencias fueron muy sólidas y sugieren que, para muchas personas, los 70 años pueden ser realmente los nuevos 60".
Por último, el experto en envejecimiento de la Universidad de Illinois, Jay Olshansky, señala que este estudio "demuestra que la capacidad intrínseca (lo que realmente importa a las personas a medida que envejecen) es inherentemente modificable. Con esta evidencia, vemos que la ciencia médica puede mejorar la capacidad intrínseca, lo que ofrece un mensaje esperanzador para el futuro".
