MADRID 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
Una de cada diez mujeres sufrirá un cuadro de hipertensión arterial durante el embarazo, tal y como lo ha advertido la responsable de la Unidad de Hipertensión del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, Nieves Martell, durante el taller 'Hipertensión arterial en la embarazada' que ha impartido en el marco de la Escuela de Verano de la Sociedad Española de Hipertensión (SEH-LELHA), celebrada estos días en Madrid.
Se trata de un problema que conlleva tanto para la madre como para el feto esto significa. Ante ello, la experta ha destacado la importancia de realizar un diagnóstico temprano que permita una monitorización adecuada de la futura madre y la aplicación del tratamiento más ajustado a cada situación se convierte en esencial en este tipo de situaciones,.
En concreto, este abordaje temprano es "particularmente importante" en los casos de preeclampsia, una manifestación agravada de la hipertensión arterial que aparece a partir de la semana 20 y que se caracteriza por combinarse con niveles elevados de proteínas en la orina (proteinuria).
"La buena noticia es que los avances científicos nos están permitiendo identificar estos casos en fases cada vez más iniciales. Lo que acarrea singulares ventajas tanto en el tratamiento a aplicar como en el seguimiento de la evolución de esta complicación médica", ha señalado Martell, para comentar que la principal causa de estos avances han sido los hallazgos en lo relacionado con los predictores clínicos de esta dolencia, es decir, los factores de riesgo que explican de manera más común su aparición.
MUJERES CON MÁS RIESGO DE PADECER HIPERTENSIÓN ARTERIAL
A la luz de esa nueva información se sabe, por ejemplo, que las embarazadas que tienen más de 40 años, problemas de diabetes o de obesidad o un diagnóstico de hipertensión crónica tienen más posibilidades de sufrir preeclampsia que las que no reúnen estas características.
"Tener esta información nos permite hacer un seguimiento más intensivo de las mujeres que reúnen este perfil de riesgo y, por tanto, detectar cualquier posible alteración lo antes posible", ha explicado la doctora Martell. No obstante, el embarazo puede derivar en una hipertensión aun no reuniendo estos factores de riesgo, ya que el 6 por ciento de las embarazadas no encuadradas en los grupos de riesgo identificados por los predictores clínicos acaban experimentando un cuadro de hipertensión durante el embarazo.
Ahora bien, un diagnóstico temprano es esencial para un correcto tratamiento, pero también lo es afinar a la hora de establecer si se trata de una patología hipertensiva grave o leve, ya que determinar la gravedad es esencial a la hora de garantizar una gestación con el menor riesgo posible. En los casos más graves, la recomendación médica es que el periodo de gestación se dé por finalizado en la semana 34, mientras que en los leves éste puede prolongarse hasta la semana 38.
Finalmente, Martell ha analizado el tratamiento ambulatorio de la preeclampsia, rechazando la recomendación de reposo absoluto en estos casos. "Hay que individualizar el tratamiento que se da a cada paciente. Pero el reposo debe ser relativo, una hora de paseo por la mañana y otra por la tarde es muy recomendable, como también lo es seguir una dieta normal, nada de dietas bajas en sal, y prestar especial atención a la reposición proteica", ha zanjado.