MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio realizado por investigadores chinos indica que las dietas maternas ricas en sal provocan hipertensión y afecciones cardiovasculares en la madre, e inducen hipertensión arterial y aumentan la predisposición a la hipertensión en la descendencia, lo que puede provocar en el futuro fibrosis cardíaca, un engrosamiento de las válvulas cardíacas.
Las dietas ricas en sal son una de las principales causas de muerte en todo el mundo y pueden provocar enfermedades cardiovasculares. Dado que la ingesta diaria de sal en China sigue siendo alta, el grupo de investigadores chinos utilizó un modelo de rata para explorar el impacto de la dieta alta en sal de una futura madre en su descendencia.
El equipo, del Tercer Hospital Afiliado de la Universidad Médica de Guangzhou en China, ha publicado ahora sus resultados en la revista 'KeAi Gynecology and Obstetrics Clinical Medicine'. Los investigadores separaron las ratas hembra preñadas en tres grupos separados y alimentamos a cada uno con una dieta que contenía una concentración diferente de sal (alta, normal y baja). Para explorar los efectos de una dieta materna alta en sal sobre la hipertensión, monitorearon la presión arterial y los niveles de proteína en la orina tanto de las madres como de su eventual descendencia.
"Descubrimos que la presión arterial de las crías con alta exposición a la sal durante el embarazo era más alta que la de las crías con una exposición normal a la sal en el útero, incluso si ambos recibieron una dieta normal después del destete. Esto sugiere que un entorno intrauterino con alto contenido de sal ya afecta el desarrollo de los bebés y continúa impactándolos a medida que pasan a la edad adulta", señala el coautor Jingsi Chen.
Para determinar la influencia de una dieta alta en sal en el tejido cardíaco de la descendencia, el equipo analizó niveles específicos de proteínas y descubrió que un entorno con alto contenido de sal podría provocar fibrosis cardíaca, que se asocia con afecciones como hipertensión e insuficiencia cardíaca. La descendencia también tenía un mayor riesgo de desarrollar presión arterial alta en la edad adulta.
"Este estudio muestra que el daño del consumo excesivo de sal es más profundo de lo que pensábamos. Todos debemos mantener nuestro consumo de sal dentro de las pautas recomendadas, especialmente las mujeres durante el embarazo", concluye Chen.
