MADRID, 15 Dic. (EDIZIONES) -
La diabetes también afecta a la menstruación de las mujeres. Los cambios hormonales que se producen justo antes y durante el periodo menstrual pueden hacer que sea difícil predecir los niveles de azúcar en la sangre. Además, según los CDC de Estados Unidos, los periodos menstruales en las mujeres diabéticas pueden ser más largos o más intensos.
Para comprender cuál puede ser la relación entre la menstruación y la diabetes entrevistamos en Infosalus a la doctora Maria M. Goya Canino, coordinadora del Grupo de Trabajo de Embarazo de la Sociedad Española de Diabetes (SED).
Según explica esta especialista, las hormonas que regulan el ciclo menstrual influyen en los niveles de glucosa en el torrente sanguíneo: "Generalmente, la concentración de glucosa en sangre aumenta tras la ovulación y tiende a descender durante la menstruación".
Se trata de una circunstancia, según prosigue, que está causada por los niveles de estrógenos y de progesterona. "Los estrógenos son hormonas sexuales femeninas que aumentan la sensibilidad celular a la acción de la insulina. Durante la semana anterior a la menstruación, tras ovular, aumentan los niveles de glucosa en sangre. En cambio, la progesterona o P4 ejerce el efecto contrario. Esta hormona aumenta la resistencia al efecto de la insulina, lo que dificulta la capacidad de absorción de las células y, por tanto, disminuye los niveles de glucosa en sangre", agrega.
De esta manera, la también consultora senior en Medicina Materno-Fetal, y especialista en Obstetricia y Ginecología del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona remarca que existen también otros aspectos directamente relacionados entre la diabetes y el ciclo menstrual: "Por ejemplo, las mujeres con diabetes Tipo 1 suelen empezar a menstruar de media un año después que aquellas mujeres que no tienen dicha enfermedad y suelen verse afectadas por problemas menstruales a una edad joven".
Asimismo, recuerda que suelen verse afectadas por problemas menstruales a una edad joven, antes de cumplir los 30. "De media, las mujeres con diabetes también tienen menstruaciones más largas y más abundantes y suelen durar varios días más que la media de mujeres sin diabetes", apostilla la también profesora asociada de la Universidad Autónoma de Barcelona.
"La producción irregular de hormonas suele generar un aumento en la resistencia de la insulina, uno de los factores principales que provocan el desarrollo de la diabetes tipo 2", agrega por otro lado la miembro de la Sociedad Española de Diabetes.
CONTROLAR LOS NIVELES DE AZÚCAR DURANTE LA REGLA
En este contexto, la doctora Maria M. Goya Canino indica que las mujeres que padecen diabetes deberían estar al tanto de estos cambios para evitar preocuparse si ven que sus niveles de azúcar en sangre aumentan alrededor de la fecha de su menstruación.
"Aquellas mujeres que necesitan inyectarse insulina para manejar sus niveles de azúcar pueden llegar a necesitar corregir sus dosis de acuerdo a estos picos hormonales. Asimismo, aquellas mujeres que están siguiendo una dieta específica o una medicación deberían controlar que estos niveles no se mantengan altos durante demasiado tiempo", resalta la especialista.
Preguntada por si debe ser modificado el patrón alimentario de las mujeres diabéticas durante la menstruación, la especialista del Vall d'Hebron mantiene que, además de crear resistencia a la insulina, la progesterona puede aumentar el deseo de comer alimentos ricos en carbohidratos.
En estos casos, por tanto, ve imprescindible controlar la alimentación: "Es una parte fundamental del cuidado que requiere la diabetes por lo que es importante tener en cuenta los cambios cíclicos y no dejar que estas fluctuaciones provocadas por los picos hormonales afecten la dieta o cambien los cuidados habituales de la enfermedad".
Desde los CDC norteamericanos aconsejan que las mujeres diabéticas eviten el nivel de azúcar en sangre con frecuencia y mantengan un registro de los resultados para ver si hay un patrón.
"Si usa insulina podría necesitar aplicarse más en los días anteriores a su periodo. Hable con el médico acerca de cambiar la dosis, si fuese necesario. Hacer actividad física la mayoría de los días, comer alimentos saludables en las cantidades adecuadas, y dormir lo suficiente también pueden ayudar", agrega.
En última instancia, la coordinadora del Grupo de Trabajo de Embarazo de la SED, la doctora Maria M. Goya Canino destaca también que en la actualidad existen pruebas que sugieren que la diabetes está asociada con una llegada más temprana de la menopausia, lo que supone que las mujeres con diabetes tienden a ser fértiles durante menos años que las mujeres sin dicha enfermedad.