MADRID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un equipo dirigido por investigadores del Hospital General de Massachusetts (Estados Unidos) ha presentado un informe sobre la prevalencia de infecciones con el virus en mujeres ingresadas en unidades de parto en varios hospitales de Boston.
Durante 18 días de pruebas universales en las unidades de los cuatro principales hospitales afiliados a Mass General Brigham Health (que proporciona atención de maternidad a unas 14.750 mujeres al año), se hicieron pruebas a 757 mujeres. De los examinados, 139 tenían síntomas posiblemente consistentes con COVID-19, es decir el 18 por ciento.
Entre las mujeres sintomáticas, el 7,9 por ciento dio positivo (11 mujeres) para el SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19. Entre las mujeres asintomáticas, el 1,5 por ciento dio positivo (9 mujeres).
Por lo tanto, 9 de las 20 mujeres (45%) que dieron positivo en el momento del ingreso no tenían síntomas de COVID-19. En los cuatro hospitales, ninguna de las mujeres asintomáticas positivas desarrolló síntomas de COVID-19 durante su hospitalización, y los 9 recién nacidos dieron negativo en la prueba del SARS-CoV-2.
"Aunque nuestros resultados indican una baja prevalencia del SARS Cov-2 en una población de embarazadas asintomáticas, creemos que la realización de pruebas universales en esta población puede ofrecer una ventana a la prevalencia de la infección en la comunidad, lo que a su vez puede ayudar a orientar la adopción de decisiones sobre el paso de las medidas de mitigación a las de contención en el hospital y en la comunidad", explica la autora principal del trabajo, Ilona Telefus Goldfarb.
Los investigadores apuntan que la realización de pruebas universales en esta población específica de pacientes es una prioridad de salud pública especialmente importante, dados los peligros potenciales de COVID-19 para la atención materna y neonatal durante y después del parto.
"Nuestros hallazgos subrayan la importancia de comprender la prevalencia local de la enfermedad, que varía según las zonas geográficas y que cambiará con el tiempo debido a muchos factores. El seguimiento prospectivo de la prevalencia puede informar las intervenciones de salud pública y nuestros enfoques de las pruebas", concluye otra de las autoras, Erica Shenoy.