No se ha encontrado ninguna evidencia de transmisión de la enfermedad de madre a hijo
MADRID, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un estudio realizado conjuntamente entre el Servicio de Obstetricia y Ginecología y la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario 12 de Octubre en mujeres embarazadas con Covid-19 atendidas en este centro revela que, en este tipo de pacientes, el riesgo de neumonía grave con necesidad de oxigenoterapia "es elevado y probablemente superior al de mujeres infectadas de la misma edad".
Así lo reflejan los resultados de una investigación publicada en la versión de acceso libre de la revista e-Clinical Medicine del grupo Lancet, cuyas conclusiones difieren de otras series difundidas anteriormente en el ámbito científico.
Concretamente, un 60 por ciento de las 52 gestantes con Covid-19 sintomáticas estudiadas tuvieron neumonía. De ellas, la mitad necesitaron tratamiento con oxígeno y una cuarta parte presentó distrés respiratorio, complicación grave consistente en una respuesta inflamatoria pulmonar que provoca respiración rápida y trabajosa, falta de aliento y presión sanguínea baja que pueden llegar a producir fallo orgánico, aunque entre los casos analizados no se registraron fallecimientos.
En las pacientes más graves se administró tratamiento inmunomodulador con tocilizumab, necesitando dos de ellas ingreso en UVI para ventilación mecánica, según ha explicado el centro hospitalario.
Por otro lado, la mitad de las pacientes presentaron neumonías leves y se pudieron dar de alta de forma precoz, presentando un perfil de bajo riesgo. La identificación de este perfil de bajo riesgo en otras pacientes "podría evitar la necesidad de ingreso hospitalario".
Este artículo ofrece uno de los primeros análisis de la Covid-19 en gestantes en España. A diferencia de lo descrito en otras series estudiadas, especialmente en China, la mayoría de las pacientes con neumonía "no necesitaron" que se les indujera el parto.
En el caso del Hospital 12 de Octubre, solo tres precisaron de cesárea por empeoramiento de la función respiratoria. "En ningún caso hubo evidencia de transmisión de la infección al recién nacido", recalca el estudio.
El facultativo de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital, Rafael San Juan, ha explicado que formaron un equipo multidisciplinar con la experiencia de otras enfermedades con un protocolo "muy definido" de manejo de pacientes.
Ante la pandemia, se comprobó que había casos "extremadamente graves" en pacientes jóvenes que requerían manejo respiratorios y oxigenoterapia, entre otras medidas, durante su ingreso.
"Aprendimos que en este grupo de edad relativamente joven que el virus se comportaba de una forma más agresiva, con tres de cada cuatro que desarrollaba neumonía (...) con necesidad de terapia", ha desgranado.
Al respecto, la doctora Patricia Barbero, de la unidad de Obstetricia y Ginecología del 12 de Octubre, ha agregado que en función de la gravedad se ponían en contacto con Enfermedades Infecciosas y ha apuntado que, durante su ingreso, se prologó la gestación con "garantías de seguridad" para madre e hijos.
ABORDAJE EFICAZ DE LOS PRIMEROS CASOS
La existencia de protocolos previos, consensuados por obstetras y expertos en enfermedades infecciosas y diseñados para el cuidado de pacientes embarazadas durante brotes de infección por otros virus respiratorios como la gripe, permitió gestionar "de manera eficaz" el cuidado de las gestantes con Covid-19 de "forma inmediata" al aparecer los primeros casos en este Hospital.
Estos procedimientos fueron elaborados en 2008 a propósito de la pandemia de Gripe A y se han "mantenido y actualizado" todos los años durante las epidemias estacionales de gripe.
Así, a principios de marzo se reajustaron "rápidamente", incluyendo un protocolo especial para la asistencia en Urgencias, seguimiento telefónico domiciliario y pautas de actuación para la hospitalización en la planta de Obstetricia en los casos necesarios.
En virtud de este método de trabajo en equipo, pacientes embarazadas con patología grave han podido ser manejadas en las plantas de hospitalización de Obstetricia con todas las garantías de seguimiento y opciones terapéuticas, permitiendo la "adecuada monitorización de la madre y el feto y optimizando la necesidad de inducción de parto
o realización de cesárea".