MADRID 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Alivia ha iniciado una campaña de recaudación mediante donaciones para ayudar a sufragar a población vulnerable, como mujeres y migrantes, algunos de los gastos que conllevan los tratamientos contra el cáncer, como sujetadores tras una mastectomía, cremas para paliar la quemazón de la radioterapia, andadores o medicamentos no cubiertos por el Sistema Nacional de Salud (SNS).
La Fundación ha advertido que, aunque el Gobierno se asegura de que todas las personas con cáncer reciban tratamientos, no algunos de los más avanzados, "nadie" se encarga de paliar los efectos económicos y laborales que también tiene la enfermedad.
Es decir, aquellos costes indirectos como el dinero destinado al transporte para ir y volver al hospital, el pago de canguros y guarderías para los hijos o los días que se debe permanecer sin trabajar y que afectan a los ingresos familiares.
"El cáncer es mucho más que curarse de la enfermedad. Tiene un gran impacto en la economía de los pacientes y sus familiares. Las mujeres migrantes son uno de los colectivos más vulnerables frente al cáncer", ha explicado la responsable de programas de la Fundación Alivia en España, Carla Galán, quien ha lamentado que la responsabilidad de que estas personas se enfrenten "con dignidad" a la enfermedad es de la población.
Aquellas personas interesadas en hacer una aportación a esta iniciativa pueden dirigirse a la página web 'https://alivia.es/colabora/', que la Fundación Alivia ha habilitado con este fin.
LAS MUJERES JÓVENES Y MIGRANTES SON LAS MÁS AFECTADAS
Según el informe 'Toxicidad financiera del cáncer', elaborado por la Asociación Española contra el Cáncer, uno de cada dos pacientes han pagado más de 5.000 euros en gastos relacionados con la enfermedad y más de la mitad han perdido ingresos. Este informe también señala que el diagnóstico tardío de la enfermedad conlleva una toxicidad financiera mucho más elevada y las mujeres soportan una carga mayor, pues en muchos casos se encargan de los cuidados cotidianos y la gestión del hogar.
Por otra parte, según un artículo publicado en 'Psycho-Oncology', los pacientes oncológicos con mayor "toxicidad financiera" son mujeres jóvenes, quienes sufren más los síntomas de la enfermedad, tienen menos adherencia a los tratamientos y mayor riesgo de muerte. Además, tienen más predisposición a padecer depresión, ansiedad y una reducida calidad de vida.
En este sentido, un metaanálisis llevado a cabo este mismo año y publicado en 'British Journal of Cancer' concluyó que los migrantes tienen menos probabilidades de ser diagnosticados en una etapa temprana y todo ello deriva en menor supervivencia frente a la enfermedad.