MADRID 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Monte Sinaí (Estados Unidos) han publicado un estudio que muestra un vínculo entre la prediabetes entre los jóvenes y los resultados adversos del embarazo en etapas posteriores de la vida. Los hallazgos, publicados en 'JAMA Network Open', podrían modificar la forma en que los médicos examinan o asesoran rutinariamente a los jóvenes sobre los niveles de glucosa en sangre y, posteriormente, minimizar los posibles riesgos maternos y neonatales.
La prediabetes es una afección grave que se produce cuando los niveles de azúcar en sangre son más altos de lo normal, pero no lo suficientemente altos como para ser diagnosticados como diabetes tipo 2 o niveles de azúcar en sangre persistentemente altos. La prediabetes puede aumentar los riesgos de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares, y afecta desproporcionadamente a las personas hispanas, negras y de bajos ingresos.
En su nuevo estudio, los investigadores del Monte Sinaí examinaron la importancia de la prediabetes antes de la concepción entre adolescentes y adultos jóvenes, un grupo que tiene mayor riesgo de embarazo no planificado y menos probabilidades de beneficiarse del asesoramiento de salud previo a la concepción.
El estudio de cohorte retrospectivo de más de 14.000 personas de entre 10 y 24 años se generó vinculando los datos del registro de nacimientos, las altas hospitalarias y el registro de A1C de la ciudad de Nueva York entre 2009 y 2017. El estudio incluyó a personas que no tenían antecedentes de diabetes y que se habían realizado al menos una prueba de hemoglobina A1c (HbA1c) antes del primer parto. Los investigadores descubrieron que la prediabetes previa a la concepción se asociaba con más del doble de probabilidades de padecer diabetes gestacional en el futuro primer parto. Los expertos descubrieron que la prediabetes durante la juventud y la adolescencia podía dar lugar a un aumento del 18 por ciento del riesgo de trastornos hipertensivos durante el embarazo, como hipertensión gestacional y preeclampsia, o parto prematuro.
El estudio también evaluó qué nivel de hemoglobina A1c, una medida del nivel promedio de azúcar en sangre de una persona durante los tres meses anteriores, era más predictivo de diabetes gestacional en el primer parto entre adolescentes y adultos jóvenes. El umbral óptimo fue ligeramente inferior para los jóvenes que el utilizado para los adultos (5,6 por ciento frente a 5,7 por ciento). En general, los resultados del estudio respaldan la necesidad de establecer una guía clínica clara sobre cómo evaluar y asesorar a los jóvenes que actualmente tienen niveles elevados de glucosa en sangre sin otros factores de riesgo, dijeron los investigadores.
"La falta de pautas uniformes para el tratamiento de la prediabetes antes de la concepción en adolescentes puede representar una oportunidad perdida para evitar complicaciones relacionadas con el embarazo", comenta la autora correspondiente Katharine McCarthy, profesora adjunta de Ciencias y Políticas de la Salud de la Población y Obstetricia, Ginecología y Ciencias Reproductivas en la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai. "Nuestros resultados respaldan la ampliación de la detección de la hemoglobina A1c antes de la concepción como un mecanismo para intervenir sobre el exceso de riesgo cardiometabólico en etapas más tempranas de la vida".
A continuación, los expertos investigarán posibles políticas e intervenciones escolares que podrían reducir los riesgos de enfermedades cardíacas y metabólicas en la adolescencia y beneficiar el embarazo y los resultados de salud a lo largo de la vida.
