MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) y la Sociedad Española de Contracepción (SEC) avalan la "eficacia y seguridad" de 'Essure', el único método comercializado en la actualidad para la esterilización tubárica sin cirugía, desde 2001.
En un comunicado de la SEGO, que suscribe la SEC, los ginecólogos aseguran que las mujeres "pueden confiar en 'Essure' como método anticonceptivo definitivo", después de que se informara de algunos casos de mujeres que referían efectos secundarios por su uso.
Se trata de un dispositivo dinámico que contiene un muelle expandible de níquel-titanio y en su interior fibras de polietilentereftalato (PET), que se ancla en las trompas de Falopio a través del
cuello uterino, de modo que las fibras de PET ocasionan una reacción local del tejido que, tras un periodo de tres meses, provoca la oclusión de la trompa lo que genera el efecto anticonceptivo. Se implanta de forma ambulatoria en la consulta médica, generalmente sin ningún tipo de anestesia.
Los ginecólogos, que aseguran que suele ser "muy bien tolerado por la paciente", recuerdan que existen numerosos estudios, incluyendo ensayos clínicos y estudios de seguimiento a 5 años, que han demostrado una eficacia superior al 99% cuando la inserción se realiza correctamente, "por lo que es una de las opciones más efectivas de control permanente de la natalidad", con un riesgo de embarazo "mínimo".
Por lo que se refiere a la seguridad del dispositivo también apuntan que existe "una amplía evidencia científica revisada por comités de expertos", y que, por lo general, solo se producen complicaciones leves y poco frecuentes, generalmente transitorias durante e inmediatamente después del procedimiento, según un estudio de seguimiento a cinco años.
Asimismo, una publicación española sobre más de 4.000 mujeres seguidas durante 7 años "confirma que la incidencia de efectos adversos a largo plazo son escasas y de carácter leve: migración del dispositivo a la cavidad uterina (0,04%), enfermedad inflamatoria pélvica (0,04%) o perforación de trompas (0,02%). Todos los casos mejoraron con la extracción del dispositivo por vía laparoscópica o histeroscópica.
Tampoco los ginecólogos, a la luz de estos estudios, consideran relevante la incidencia de dolor pélvico o la alergia al níquel en las portadoras de dispositivo.
RECOMENDACIONES
Por ello, la SEGO aconseja a los doctores que seleccionen adecuadamente a las mujeres a quienes se puede recomendar el implante, informarles "con detalle y de forma exhaustiva" de las posibles complicaciones a corto y largo plazo así como de la conducta a seguir para su resolución y insistirles en que acudan a la visita de revisión/confirmación de los 3 meses, "ya que en esta consulta se comprueba la correcta colocación de los dispositivos y la obstrucción de las trompas".
Además, recomiendan que se facilite un contacto a las usuarias para que puedan consultar cualquier duda o efecto adverso tras la colocación y se establezcan los circuitos adecuados para que, en el caso de que aparezca una complicación, la mujer encuentre una respuesta adecuada en el menor tiempo posible.