MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
Una mejor comprensión del desarrollo del sistema inmunológico de una mujer durante el embarazo puede ofrecer posibilidades de diagnóstico, según un estudio de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU) en el Centro de Investigación de Inflamación Molecular (CEMIR), que se dedica a estudiar la inflamación durante el embarazo.
El estudio, que se ha publicado 'Frontiers in Immunology', ha analizado a 707 mujeres embarazadas, que posteriormente dieron a luz a bebés sanos. "Nuestro sistema inmunológico está regulado por moléculas de señalización celular llamadas citocinas. Las moléculas de señalización pueden desencadenar o detener las respuestas inmunitarias. Perfilamos varias citocinas diferentes en la sangre utilizando una simple muestra de sangre de la madre. Vincular las mediciones de muchas citocinas en varios puntos del embarazo nos dio una impresión de la respuesta inmune de la madre", ha comentado el investigador Anders Hagen Jarmund.
Así pues, los investigadores han encontrado que la actividad inmunológica en embarazos normales sigue un patrón determinado, con una activación inmunitaria elevada en los primeros tres meses, luego una fase más tranquila en los tres siguientes y una actividad más alta en los últimos tres meses, especialmente cuando el parto es inminente.
"Nuestro estudio puede servir como referencia de lo que es normal en las diferentes etapas del embarazo. Al comparar los análisis de muestras de sangre de la mujer embarazada con nuestra encuesta, podemos detectar anomalías muy temprano", ha comentado Jarmund.
El investigador ha reconocido que descubrieron varias afecciones en la madre o el feto que creaban anomalías en la respuesta inmunitaria. "Los cambios inmunes detectados con el perfil de citocinas son tan sensibles que capturan los efectos de la obesidad y el tabaquismo en la madre. El sistema inmunológico también se ve afectado si el feto tiene retraso en el crecimiento, e incluso puede indicar si es un niño o una niña", ha explicado Jarmund.
Por otro lado, el estudio analiza a las mujeres con síndrome de ovario poliquístico(SOP) y ha comparado la sangre de 358 mujeres con SOP y un grupo de muestra de mujeres sanas. En este caso, se ha demostrado que las mujeres con SOP tienen una mayor activación inmunitaria durante el embarazo que las mujeres sanas, y su respuesta inmunitaria se desarrolló de manera diferente durante las tres fases del embarazo, que fumaban o tenían sobrepeso mostraron una activación inmunológica aún más fuerte.