MADRID, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
Experimentos llevados a cabo en ratones han revelado que un compuesto comúnmente encontrado en el aceite de oliva virgen extra puede revertir algunos de los efectos negativos de una dieta alta en grasas. Este compuesto, llamado hidroxitirosol, fue capaz de cambiar los marcadores de resistencia a la insulina y la enfermedad hepática grasa no alcohólica en roedores alimentados con una dieta rica en grasas.
Aunque hay pruebas sustanciales de que el consumo de aceite de oliva extra virgen como parte de una dieta equilibrada, puede ser beneficioso para la salud, las razones biológicas y fisiológicas de esta asociación han sido poco claras. "El hidroxitirosol es un polifenol que se encuentra en el aceite de oliva virgen extra, que se sabe que tiene propiedades antioxidantes y puede desempeñar un papel clave en sus beneficios para la salud. En ratones alimentados con una dieta alta en grasa, el hidroxitirosol ejerce un efecto protector en el hígado", explica el doctor Rodrigo Valenzuela, profesor de la Universidad de Chile.
Los investigadores estaban interesados en analizar los efectos del hidroxitirosol en enzimas específicas del hígado que son importantes para la síntesis de ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga, algunos de los cuales juegan un papel importante en la salud vascular. Se demostró que los ratones alimentados con una dieta rica en grasas tenían una reducción en estas enzimas hepáticas, lo que estaba asociado a un desequilibrio en la composición de ácidos grasos del hígado, el cerebro y el corazón.
Los ratones con una dieta rica en grasas suplementada con hidroxitirosol mostraron actividad enzimática y composición de ácidos grasos en estos tres órganos, lo que refleja lo observado en roedores alimentados con una dieta regular.
Valenzuela destaca: "Nuestro estudio encontró que los ratones alimentados con una dieta rica en grasa tenían signos de enfermedad hepática no alcohólica que creemos que ha llevado a la notable reducción de la actividad enzimática en el hígado y los efectos negativos sobre la composición de ácidos grasos en éste y otros órganos. También encontramos que el hígado mostró signos de aumento del estrés oxidativo, que sabemos que tiene vínculos con la enfermedad hepática grasa. Es intrigante que la adición de una dosis relativamente baja de hidroxitirosol a la dieta fue capaz de revertir estos efectos, reducir los signos de enfermedad hepática grasa y disminuir los efectos negativos observados en los otros órganos".
Cuatro grupos de 12-14 ratones fueron alimentados con una dieta alta en grasa (60 por ciento de grasa) o una dieta de control (10 por ciento de grasa), con o sin suplementación de 5 mg de hidroxitirosol por kilogramo de peso corporal, administrada por vía oral, durante 12 semanas. Se recogieron muestras de sangre y tejido al final del experimento para estudiar los efectos dietéticos sobre el estrés oxidativo, la composición de ácidos grasos y la actividad enzimática en múltiples órganos.
ATENÚA EL AUMENTO DEL COLESTEROL
El análisis de muestras de sangre reveló un aumento en los niveles de colesterol total y colesterol LDL sin cambios en el colesterol HDL en ratones alimentados con una dieta alta en grasas, los cuales fueron atenuados por hidroxitirosol. La dieta rica en grasas también incrementó los marcadores de resistencia a la insulina en la sangre que fueron reducidos por el hidroxitirosol, aunque no a los niveles de ratones alimentados con una dieta de control.
Los resultados de este estudio, que se revelan en un artículo publicado en 'Lipids in Health Disease', fortalecen la evidencia de que muchos de los beneficios asociados con el consumo dietético de aceite de oliva virgen extra pueden estar vinculados a su contenido de hidroxitirosol, según los investigadores.
"Nuestros resultados indican que el hidroxitirosol puede ser una parte clave de los beneficios para la salud del aceite de oliva virgen extra. Hemos demostrado que este compuesto puede ofrecer protección contra el estrés oxidativo y la composición de ácidos grasos perjudiciales en hígado, corazón y cerebro causados por una dieta rica en grasa. Sin embargo, se debe tener precaución al extrapolar estos hallazgos al consumo humano de hidroxitirosol, ya que nuestros experimentos se han realizado con ratones en un ambiente controlado", agrega Valenzuela.