El efecto de los edulcorantes no nutritivos sobre el microbioma humano

Archivo - Mujer pone edulcorante en el café
Archivo - Mujer pone edulcorante en el café - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / ANDRII BICHER - Archivo
Publicado: miércoles, 24 agosto 2022 7:21


MADRID, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -

Los edulcorantes no nutritivos afectan al microbioma humano y pueden alterar las respuestas glucémicas, según un estudio publicado en la revista 'Cell'.

Desde finales del siglo XIX, los edulcorantes han prometido ofrecer todo el dulzor del azúcar sin ninguna de sus calorías y durante mucho tiempo se ha creído que no tienen ningún efecto en el cuerpo humano, pero ahora los investigadores desafían esta noción al encontrar que estos sustitutos del azúcar no son inertes y, de hecho, algunos pueden alterar los microbiomas de los consumidores humanos de una manera que puede cambiar sus niveles de azúcar en la sangre.

En 2014, el autor principal, Eran Elinav, inmunólogo e investigador del microbioma en el Instituto Weizmann de Ciencias y el Centro Nacional Alemán del Cáncer (DKFZ), y su equipo descubrieron que los edulcorantes no nutritivos afectaban al microbioma de los ratones de forma que podían afectar a sus respuestas glucémicas. El equipo estaba interesado en saber si estos resultados también se darían en los seres humanos.

Para abordar esta importante cuestión, el equipo de investigación examinó cuidadosamente a más de 1.300 personas que evitaban estrictamente los edulcorantes no nutritivos en su vida cotidiana, e identificó una cohorte de 120 individuos. Estos participantes se dividieron en seis grupos: dos de control y cuatro que ingerían cantidades muy inferiores a las permitidas por la FDA de aspartamo, sacarina, estevia o sucralosa.

"En los sujetos que consumían los edulcorantes no nutritivos, pudimos identificar cambios muy marcados en la composición y la función de los microbios intestinales, y las moléculas que secretan en la sangre periférica. Esto parece sugerir que los microbios intestinales del cuerpo humano son bastante sensibles a cada uno de estos edulcorantes", señala Elinav.

"Cuando observamos a los consumidores de edulcorantes no nutritivos como grupos, descubrimos que dos de los edulcorantes no nutritivos, la sacarina y la sucralosa, afectaban significativamente a la tolerancia a la glucosa en adultos sanos --añade--. Curiosamente, los cambios en los microbios estaban altamente correlacionados con las alteraciones observadas en las respuestas glucémicas de las personas".

Para establecer la causalidad, los investigadores transfirieron muestras microbianas de los sujetos del estudio a ratones sin gérmenes, criados en condiciones completamente estériles y sin microbioma propio.

"Los resultados fueron bastante sorprendentes --destaca Elinav--. En todos los grupos de edulcorantes no nutritivos, pero en ninguno de los controles, cuando transferimos a estos ratones estériles el microbioma de los individuos que respondían mejor, recogido en un momento en el que consumían los respectivos edulcorantes no nutritivos, los ratones receptores desarrollaron alteraciones glucémicas que reflejaban de forma muy significativa las de los individuos donantes".

"Por el contrario, los microbiomas de los respondedores inferiores fueron en su mayoría incapaces de provocar tales respuestas glucémicas --añade--. Estos resultados sugieren que los cambios del microbioma en respuesta al consumo humano de edulcorante no nutritivo pueden, en ocasiones, inducir cambios glucémicos en los consumidores de forma muy personalizada".

Elinav afirma que espera que los efectos de los edulcorantes varíen de una persona a otra debido a la composición única de nuestro microbioma.

"Tenemos que concienciar sobre el hecho de que los edulcorantes no nutritivos no son inertes para el cuerpo humano como creíamos en un principio --advierte--. Dicho esto, las implicaciones clínicas para la salud de los cambios que pueden provocar en los seres humanos siguen siendo desconocidas y merecen futuros estudios a largo plazo".

"Mientras tanto, tenemos que seguir buscando soluciones a nuestro antojo de dulces, evitando al mismo tiempo el azúcar, que es claramente el más perjudicial para nuestra salud metabólica --afirma Elinav--. En mi opinión personal, beber sólo agua parece ser la mejor solución".