MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
Añadir a las dietas el nutriente selenio, que está presente en carnes rojas, pescado, cereales integrales o algunos tipos de verdura como la cebolla y los espárragos, protege contra la obesidad y proporciona beneficios metabólicos a los ratones, según un estudio publicado en la revista científica 'eLife'. Los resultados podrían conducir a intervenciones que reproduzcan muchos de los efectos antienvejecimiento asociados a la restricción de la dieta, al tiempo que permitan a las personas comer con normalidad.
Se ha demostrado que varios tipos de dieta aumentan la duración de la salud, es decir, el periodo de vida saludable. Uno de los métodos probados para aumentar la esperanza de vida en muchos organismos, incluidos los mamíferos no humanos, es restringir la ingesta dietética de un aminoácido llamado metionina.
Estudios recientes han sugerido que los efectos de la restricción de metionina en la esperanza de vida probablemente se conserven en los seres humanos. Aunque para algunas personas puede ser factible practicar la restricción de metionina, por ejemplo, siguiendo una dieta vegana, dicha dieta podría no ser práctica o deseable para todos. En este estudio, un equipo de investigación de la Fundación Orentreich para el Avance de la Ciencia de Cold Spring, Nueva York (Estados Unidos) se propuso desarrollar una intervención que produjera los mismos efectos que la restricción de metionina y que, al mismo tiempo, permitiera al individuo seguir una dieta normal sin restricciones.
Una pista importante para desarrollar un tratamiento de este tipo es que la restricción de metionina provoca una disminución de las cantidades de una hormona reguladora de la energía llamada IGF-1. Si se encontrara un tratamiento que provocara una disminución similar del IGF-1, también podría tener efectos beneficiosos para la salud. Investigaciones anteriores han demostrado que la administración de suplementos de selenio reduce los niveles de IGF-1 circulante en ratas, lo que sugiere que éste podría ser un candidato ideal.
El equipo estudió primero si los suplementos de selenio ofrecían la misma protección contra la obesidad que la restricción de metionina. Alimentaron a ratones machos jóvenes y hembras mayores con una de las tres dietas ricas en grasas: una dieta de control que contenía cantidades típicas de metionina, una dieta con restricción de metionina y una dieta que contenía cantidades típicas de metionina así como una fuente de selenio.
En ratones machos y hembras de cualquier edad, los autores descubrieron que la administración de suplementos de selenio protegía completamente contra el espectacular aumento de peso y la acumulación de grasa observados en los ratones alimentados con la dieta de control, y en la misma medida que la restricción de metionina.
A continuación, exploraron los efectos de las tres dietas sobre los cambios fisiológicos normalmente asociados a la restricción de metionina. Para ello, midieron las cantidades de cuatro marcadores metabólicos en muestras de sangre de los ratones previamente tratados. Como se esperaba, encontraron niveles drásticamente reducidos de IGF-1 tanto en los ratones machos como en las hembras.
También observaron reducciones en los niveles de la hormona leptina, que controla la ingesta de alimentos y el gasto energético. Sus resultados indican que la administración de suplementos de selenio produce la mayoría, si no todas, las características de la restricción de metionina, lo que sugiere que esta intervención puede tener un efecto positivo similar en la duración de la salud.
Para conocer los efectos beneficiosos de la administración de suplementos de selenio, los investigadores utilizaron un organismo diferente: la levadura. Las dos medidas más utilizadas para medir la esperanza de vida en las levaduras son la vida cronológica, que nos indica cuánto tiempo permanecen viables las levaduras inactivas, y la vida replicativa, que mide el número de veces que una célula de levadura puede producir nuevas crías.
El equipo demostró previamente que la restricción de metionina aumenta la vida cronológica de la levadura, así que probaron si la suplementación con selenio podría hacer lo mismo. Resultó que la levadura cultivada en condiciones de suplemento de selenio tenía una vida cronológica un 62 por ciento más larga (de 13 a 21 días) y una vida replicativa ampliada en nueve generaciones en comparación con los controles. Esto demuestra que la suplementación de la levadura con selenio produce beneficios para la salud detectables mediante múltiples pruebas de envejecimiento celular.
"La administración a corto plazo de fuentes orgánicas o inorgánicas de selenio proporciona múltiples beneficios para la salud de los ratones, el más notable de los cuales es la prevención de la obesidad inducida por la dieta. A largo plazo, esperamos que la suplementación con estos compuestos también prevenga las enfermedades relacionadas con la edad y prolongue la supervivencia general de los ratones. Esperamos que muchos de los beneficios observados en los ratones sean también válidos para los humanos", concluye el líder de la investigación, Jay Johnson.