MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
En los últimos 20 años se ha incrementado un 200,4 por ciento los nacimientos de grandes prematuros, es decir los niños que nacen por debajo de la semana 32 de gestación o pesan menos de 1.500 gramos, que potencialmente son los que tiene más dificultades para sobrevivir, según datos presentados por Asociación de Padres Niños Prematuros (APREM).
"No son un número importante de niños del total de los nacidos en España, representan un 1 por ciento, pero sí son los que tiene más dificultades dentro de los neonatos", ha explicado a Europa Press la vicepresidenta de APREM, Concepción Gómez Esteban, con motivo del Día Internacional de los Niños Prematuros, celebrado este domingo.
Por el contrario, teniendo en cuenta los datos globales el nacimiento de prematuros - antes de que se cumplan las 37 semanas de gestación- se mantiene, supone alrededor del 6 o 7 por ciento de los nacimientos, un dato que incluso se ha reducido levemente con respecto a años anteriores debido, según la experta, a que se realizan menos técnicas de reproducción asistida.
"Uno de los aspectos que inciden en el crecimiento de niños prematuros son las técnicas de fecundación asistida, posiblemente ahora por la crisis se recurre menos, se ve que está bajando en términos relativos de niños nacidos prematuros", ha afirmado.
Los últimos datos recogidos por Instituto Nacional de Estadística, fueron presentados en 2012, y se puede ver que por debajo de 37 semanas nacieron 29.122 niños, mientras que en el año anterior fueron 29.972 y 31.000 los niños de 2010 que nacieron prematuramente.
Esta experta recuerda que los partos prematuros no son fáciles de prevenir, ya que tienen muchas causas -sociales y biológicas-; afortunadamente, añade "ahora sobreviven más prematuros que antes gracias a los avances que se producen en el cuidado de estos niños".
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la prematuridad es la segunda causa principal de muerte en los niños menores de 5 años y cada año nacen 15 millones de bebés antes de tiempo en el mundo, dato que implica que uno de cada diez bebés nacidos en el mundo es prematuro.
Sólo en Europa, 500.000 bebés nacen prematuros cada año, de los que más de 29.000 lo hacen en España, constatando un aumento del 36% desde 1.996. De acuerdo con el informe Euro-Peristat sobre la situación de los niños nacidos prematuros en Europa, España se sitúa entre los países con mayor tasa de nacimientos prematuros, siendo uno de cada 13.
LA ATENCIÓN AL NIÑO PREMATURO
Los neonatos prematuros tienen un mayor riesgo de desarrollar problemas de salud que aquellos que nacen a término. El grado de prematuridad repercute en un mayor riesgo de complicaciones graves como es la parálisis cerebral, déficits sensoriales, enfermedades crónicas o de padecer infecciones respiratorias agudas, especialmente la bronquiolitis causada por el virus respiratorio sincitial (VRS).
"Los niños prematuros, cuando son muy prematuros, necesitan mucho apoyo a lo largo de todo el proceso de escolarización y de su desarrollo", explica Gómez Esteban, quien ha llevado a cabo una investigación a cargo del Plan Nacional en niños prematuros por debajo de 1.500 gramos, desde 1993 y 2011, donde han participado 1.200 familias que han podido aportar cómo se ha trabajado con estos niños estos 11 años.
Aunque la investigación está pendiente de publicación, adelanta que se ha podido observar como en estos años se ha producido una reducción de las grandes discapacidades en los grandes prematuros. "Antes estos niños se quedaban ciegos, sordos o tenían parálisis cerebral, ahora ocurre menos; lo que seguimos observando son trastornos de aprendizaje relacionados, sobre todo, con la conducta, el déficit de atención y hiperactividad", explica.
En el estudio queda patente el "reto" que supone para las familias sacar adelante a un gran prematuro, "además muchas veces se encuentran solas, porque no hay suficiente apoyo por parte de las Administraciones sobre el cuidado de estos niños".
Estos niños no pueden ir a la guardería durante los dos primeros años, necesitan cuidado médico prolongado, tiene muchas visitas médicas y consumen más recursos económicos, además en la mayoría de las ocasiones no existen o no hay plazas en centros públicos especializados en su atención.
"Cada vez más padres tienen que pagar profesionales privados porque no siempre los encuentran" dentro de los recursos que les facilita la administración, afirma en referencia a otro de los datos del estudio, que además trata la conciliación laboral de estas familias, la atención a otros hijos y la situación en las que se encuentran los padres.
"La incertidumbre sobre el futuro de los hijos es muy grande, están muy preocupados por cuál puede ser el desarrollo del hijo; y también se ven actitudes paternas inevitables como la sobreprotección de estos niños", añade.
De cara a las necesidades de los prematuros recuerda que, teniendo en cuenta que su adaptación y aprendizaje va a una velocidad diferente que el resto de los niños, recuerda que es importante que haya suficientes plazas de atención temprana y programas de rehabilitación, además de profesionales de logopedia y educación especial.
"Prevenir la discapacidad es rentable para toda la sociedad, no es solo la calidad de vida o su salud, sino que se previene el desarrollo de una discapacidad", afirma Gómez Esteban, quien recuerda que, la plasticidad cerebral del bebé, es fundamental tratar al bebé los primeros meses.