Un 37% de vapeadores lo ha dejado o reducido tras ver la campaña del Ministerio y bajan las ventas pero fuman más tabaco

Vapear, cigarrillo electrónico.
Vapear, cigarrillo electrónico. - PIXABAY - Archivo
Actualizado: miércoles, 4 diciembre 2019 15:54

MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

Un 37 por ciento de los usuarios de dispositivos de vapeo han reducido su consumo (29%) o han dejado de utilizarlos (8%), ya que la mayoría considera que no vale la pena vapear para dejar fumar o disminuir el consumo de tabaco (66%), e incluso aseguran que es preferible fumar tabaco que vapear (62%), tras el lanzamiento en septiembre de la campaña del Ministerio de Sanidad 'El tabaco ata y te mata. En todas sus formas' y, al mismo tiempo, revela un aumento en el consumo de tabaco, según una encuesta realizada por la consultora de investigación Deskmind Research a 760 usuarios a principios de noviembre.

Según este sondeo, en un 39% de los encuestados ha disminuido la percepción negativa del tabaco al ser equiparado en los mensajes con el vapeo, y han aumentado su consumo de tabaco a raíz de la misma, fumando un 77% más que antes (de 5,3 a 9,4 cigarrillos/día de media). Antes de ver esta campaña, el 53% de los encuestados consideraban el vapeo igual de dañino que el tabaco, y a raíz de esta campaña este porcentaje se ha incrementado 10 puntos hasta el 63% de los vapeadores.

Los encuestados apuntan que desde que vapean de manera habitual han reducido su consumo de tabaco a menos de la mitad que antes (de 13,5 a 6,3 cigarrillos/día de media). Incluso, los fumadores que vapean y no están interesados en dejar de fumar han reducido su consumo de tabaco (de 14,1 a 7,9 cigarrillos / día de media), según la encuesta, en la que un 81% considera que si se demostrase que el vapeo es un método efectivo para dejar de fumar las autoridades sanitarias deberían apoyarlo.

La mayoría de los vapeadores (60%) habían recurrido a este método para dejar de fumar tras probar otros como chicles o parches, y fracasar (83%).

Una segunda encuesta realizada a 200 estanqueros en las mismas fechas, revela que uno de cada tres estancos ha notado una caída en las ventas de dispositivos de vapeo pero apenas lo han notado en las de tabaco. Concretamente, un 93% declara que a raíz de la campaña no ha disminuido sus ventas de tabaco.

Estos profesionales apuntan que la mayoría de sus clientes compran productos de vapeo con la intención de reducir o abandonar totalmente el consumo de tabaco y que muchos de ellos (un 48%) consiguen su objetivo. Según afirman, uno de cada cuatro clientes fumadores ha dejado de fumar o ha disminuido considerablemente su consumo de tabaco.

Según esta encuesta, los estanqueros consideran que la campaña ha servido para que una cierta cantidad de vapeadores abandonen el uso de cigarrillos electrónicos (hasta un 12%) pero al mismo tiempo que un 34% de los vapeadores vuelva a fumar, o fume más que antes. Estos sujetos fuman de media un 38% más de cigarrillos que antes de la campaña.

Estos datos están en la línea de los publicados por PiperJaffray, que confirmó que la prohibición de los productos de vapeo en Massachussets (Estados Unidos) había provocado que las personas que habían recurrido a los cigarrillos electrónicos para no fumar estaban volviendo a hacerlo.