MADRID 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
Al menos, 2 de cada 5 españoles desconoce qué es o en qué consiste la insuficiencia cardiaca, según revela la encuesta poblacional realizada en España por la Alianza de Boehringer Ingelheim y Lilly, que cuenta con el aval social de la organización de pacientes CardioAlianza, y presentada este viernes con el objetivo de dar a conocer una enfermedad que afecta a más de 700.000 personas en España.
Esta iniciativa forma parte de la campaña de concienciación social 'Llámalo Insuficiencia Cardiaca, ¡y actúa ya!', que tiene como objetivo dar a conocer esta enfermedad crónica entre la población general, pacientes y su entorno más próximo.
Además, como parte de esta campaña, la Alianza ha puesto en marcha 'La Ruta de la Insuficiencia Cardiaca', un recorrido por diferentes ciudades de España que se ha iniciado este viernes en Madrid y que recorrerá Girona, A Coruña y Málaga colocando vinilos informativos en la calle para llamar a la insuficiencia cardiaca por su nombre y ser capaces de detectar los posibles síntomas a tiempo y poder acudir al médico lo más formado e informado posible.
Esta acción cuenta con Virginia Troconis como madrina de excepción, quien durante la inauguración de la Ruta en Madrid ha señalado que "es de vital importancia que la gente conozca la insuficiencia cardiaca. Normalmente decimos tengo un problema del corazón, estoy mal del corazón, pero es importante llamar a las cosas por su nombre para poder hacerles frente. Me siento muy orgullosa de poder aportar mi granito de arena".
La insuficiencia cardiaca es una enfermedad crónica y progresiva del corazón que impide que éste tenga capacidad suficiente para bombear sangre. Aunque puede manifestarse a cualquier edad, con cada década que sumamos se dobla su presencia entre la población. Al igual que en otros países desarrollados, la insuficiencia cardiaca es la primera causa de hospitalización en mayores de 65 años y supone, aproximadamente, el 5% de todas las hospitalizaciones.
El diagnóstico de insuficiencia cardiaca lleva asociado una alta mortalidad y cada año casi 20.000 personas mueren por esta patología en España. Sin tratamiento, el pronóstico de la insuficiencia cardiaca es peor que el de muchos cánceres.
Tal y como se desprende de la encuesta, el desconocimiento sobre la insuficiencia cardiaca está extendido entre la población española, que también considera, de forma mayoritaria (83%), que no existe información suficiente sobre esta enfermedad. Enfermedades como el infarto de miocardio o la hipertensión son más reconocidas que la insuficiencia cardiaca, apareciendo por delante en el ranking de las enfermedades cardiovasculares que los españoles consideran más frecuentes.
Sobre la razón por la que conocen la enfermedad, en un tercio de los casos es porque se han informado a través de las noticias (41,42%), siendo esta proporción mayor en mujeres (32,85%) que en hombres (27,8%), mientras que un 10% reconoce no haber oído hablar de la insuficiencia cardiaca con anterioridad.
"La población está más familiarizada acerca de lo que es un infarto o un ictus. Dar a conocer la insuficiencia cardiaca debería realizarse desde varios estratos. En primer lugar, desde el entorno sanitario, tanto en atención primaria como en cardiología los pacientes con factores de riesgo para desarrollar insuficiencia cardiaca deberían ser entrenados acerca de los síntomas o signos de alarma", señala la doctora Marta Cobo, Adjunto de Cardiología en Hospital Puerta de Hierro Majadahonda.
LAS FALSAS CREENCIAS
La falta de información de esta enfermedad entre la sociedad da lugar a una serie de mitos o falsas realidades sobre ella y el día a día de quienes la sufren. Entre ellas, una de las falsas creencias generalizadas es que la insuficiencia cardiaca afecta más a hombres que a mujeres. "Esta idea es bastante habitual entre los españoles, ya que más de la mitad de los encuestados considera que la insuficiencia cardiaca es más frecuente entre los hombres", afirman en un comunicado.
Aunque la incidencia de nuevos casos de insuficiencia cardiaca es mayor en hombres, la realidad es que aproximadamente la mitad de los pacientes con insuficiencia cardiaca son mujeres, en parte, debido a que la prevalencia de la insuficiencia cardiaca aumenta con la edad, y a la mayor longevidad de la mujer.
Y respecto a cómo afecta esta enfermedad en las actividades cotidianas, 2 de cada 5 españoles piensa que la insuficiencia cardiaca repercute en las relaciones íntimas, dato que se encuentra por debajo de la media española, los mismos que también opinan que afecta a las actividades de ocio y a las tareas del hogar.
Además, un 18% de los españoles considera que vestirse es una de las actividades cotidianas que también se ve afectada por la enfermedad, y un 12,56% opina que repercute en la capacidad de prepararse la comida. "Datos que revelan que buena parte de los encuestados son conscientes de que la insuficiencia cardiaca condiciona de forma notable las actividades cotidianas", afirman.
En cuanto al conocimiento de los síntomas relacionados con la enfermedad, 2 de cada 3 encuestados españoles identifica el cansancio y la debilidad como los más reconocidos, seguido muy de cerca por la dificultad para realizar actividad física y la disnea o dificultad para respirar. Las palpitaciones son también un síntoma relacionado con esta patología para la mitad de la población española, y 1 de cada 4 considera la hinchazón de pies y piernas como un síntoma principal.
"Aunque se están realizando progresos en la comunicación entre atención primaria y cardiología, todavía hay limitaciones en el diagnóstico precoz de la insuficiencia cardiaca, entre otras cosas, por la ausencia de reconocimiento de los síntomas y signos de alarma por parte de los pacientes. Los beneficios de reconocer los síntomas de manera temprana implicarían un diagnóstico precoz y un acceso de forma más temprana a tratamientos con beneficio pronóstico", apunta la doctora.
"El abordaje de la insuficiencia cardiaca se está convirtiendo en todo un reto para el sistema sanitario. Nuestro principal objetivo debe ser el de conseguir aumentar la concienciación de la población sobre la IC, con el fin de que se realice un diagnóstico temprano y eficaz a la vez que se genere consciencia social en toda la población", destaca Maite San Saturnino como presidenta de CardioAlianza.