MADRID, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El 70 por ciento de las personas con migraña que empiezan un tratamiento preventivo oral abandona el tratamiento a los 12 meses, lo que podría suponer un aumento del coste anual por paciente de 622 euros para la sociedad, según el estudio 'Persistencia, uso de recursos y costes en pacientes bajo tratamiento preventivo de migraña' (PERSEC, por sus siglas en inglés), impulsado por Lilly y publicado recientemente en la revista 'The Journal of Headache and Pain'.
El trabajo, basado en el análisis de la situación de los pacientes entre 2016 y 2018, ha sido liderado en España el neurólogo de la Clínica Universidad de Navarra y coordinador del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología (GECSEN), Pablo Irimia. El objetivo ha sido conocer la persistencia a los tratamientos orales clásicos de la migraña, los patrones de prescripción de los tratamientos para la prevención de esta patología, así como su relación con el uso de recursos sanitarios y sus costes.
"Este estudio muestra que, de los 7.876 pacientes con migraña que iniciaron tratamientos preventivos, un 32,4 por ciento fueron persistentes al tratamiento durante 6 meses y un 30,4 por ciento durante 12 meses. Además, los pacientes que no eran persistentes con el tratamiento consumían muchos más recursos sanitarios. Estos resultados sugieren que es necesario introducir fármacos más eficaces, mejor tolerados y con esquemas terapéuticos sencillos para que el paciente no abandone la medicación y, de esta manera, ahorrar costes al sistema sanitario", ha dicho Irimia.
Desde la Asociación Española de Migraña y Cefalea (AEMICE) han destacado la importancia de que el médico pueda dedicar tiempo a explicar al paciente en qué consiste el tratamiento, el manejo que debe realizar para potenciar su efectividad y lo que es tanto o más importante gestionar sus expectativas ante el tratamiento. "Y en este sentido apelamos también a los pacientes que no se siente conformes con los resultados a que retomen la visita con su especialista y no abandonen por su cuenta", han dicho.
En España, más de cinco millones de personas presentan migraña, de los cuales 1,5 millones padecen migraña crónica. La prevalencia de esta enfermedad alcanza el 12 por ciento de la población. En este sentido, esta patología provoca consecuencias en el ámbito social, familiar y profesional, y plantea un importante problema de salud pública.
"Esta enfermedad tiene un elevado coste para el sistema nacional de salud por la necesidad de visitas médicas, atención en urgencias e ingresos hospitalarios, sobre todo en pacientes con episodios muy frecuente y de gran intensidad", ha indicado el doctor.
Ninguno de los fármacos preventivos clásicos orales disponibles en España hasta 2019 había sido diseñado específicamente para la migraña, su eficacia es moderada y la mayoría de los tratamientos orales presentan problemas de tolerabilidad en un importante número de pacientes.
Los tratamientos actuales, anticuerpos monoclonales que actúan en la vía del péptido relacionado con el gen de la calcitonina (CGRP), tienen la ventaja de que son muy bien tolerados a diferencia de los preventivos clásicos orales. "La administración mediante una inyección mensual por vía subcutánea facilita el cumplimiento terapéutico de forma correcta. Es posible que con los preventivos orales el paciente olvide tomas de medicación y los fármacos no sean tan eficaces. Si el tratamiento preventivo es eficaz, se reduce el número de días de migraña y su intensidad, permitiendo que el paciente controle adecuadamente el dolor y mejore su calidad de vida", ha argumentado el experto.
Estos tratamientos permiten un seguimiento trimestral para valorar la respuesta basado en los datos de eficacia y favorable perfil de seguridad. "Cuando el paciente toma el tratamiento preventivo siguiendo las recomendaciones médicas y durante el tiempo prescrito, el número de crisis de migraña puede reducirse a la mitad y la intensidad de las crisis también se reduce. Por este motivo, es tan importante la adherencia y la persistencia a la medicación", ha zanjado Irimia.