MADRID 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los malos hábitos auditivos, como el abuso de auriculares para escuchar música, la asistencia a conciertos y locales de ocio con música alta o la contaminación acústica que se sufre en las ciudades industrializadas españolas, aumentan el riesgo de sordera, según advierte la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC).
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 50 por ciento de las personas entre 12 y 35 años utiliza dispositivos electrónicos a niveles inseguros en países de ingresos medios y altos.
Además, casi un tercio de los españoles están expuestos a niveles de ruido por tráfico superiores a los aceptables, lo que provoca pérdida de audición y otros problemas de salud, siendo responsable de un 85 por ciento de las emisiones acústicas.
Ante este contexto, y con motivo del Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido, conmemorado este miércoles 24 de abril, desde la SEORL subrayan que para garantizar una buena salud auditiva se recomienda no superar los 65 dB.
En este sentido, advierten de que una exposición a un sonido superior a 85 dB supone un riesgo de pérdida auditiva si se repite en el tiempo y, por encima de 100 dB, existe un riesgo de pérdida inmediata. El ruido llega al umbral del dolor cuando se sobrepasan los 125 dB y puede ser insoportable a los 140 dB.