Aconsejan a mujeres con cáncer de mama y terapia a largo plazo que se reincorporen al trabajo con horarios flexibles

Archivo - Cáncer de mama, fonendoscopio, doctora.
Archivo - Cáncer de mama, fonendoscopio, doctora. - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / HIN255 - Archivo
Publicado: miércoles, 1 febrero 2023 9:51


MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

Expertos reunidos con motivo de la celebración de un encuentro organizado por Lilly, con la colaboración de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA), han recomendado a las mujeres con cáncer de mama, y que tienen un tratamiento a largo plazo, que se reincorporen al trabajo de forma gradual y con horarios flexibles.

En España, se diagnosticarán más de 35.000 casos de cáncer de mama este año, de los cuales en el 70 por ciento de los casos se tratará de mujeres con cáncer hormonosensible o luminal, con tratamiento adyuvante a largo plazo, durante cinco o diez años después del diagnóstico. Además, se estima que un 15 por ciento de estas pacientes sufrirán un alto riesgo de recaída.

Al impacto del diagnóstico de cáncer de mama y su tratamiento continuado, cuya adherencia es crítica para obtener el máximo beneficio, se suman los efectos adversos y el seguimiento médico cuando el paciente se reincorpora al entorno laboral, conviviendo con un gran impacto psicosocial.

"Los oncólogos intentamos mantener la crucial adherencia terapéutica manejando los efectos secundarios a los que se enfrentan en su día a día las pacientes hormonosensibles, que no son tan agresivos o visibles como la quimioterapia, pero sí pueden interferir en su vida laboral habitual. Por ello, buscamos las herramientas para sortearlos o minimizarlos para que las pacientes vuelvan a una actividad normal, no se sientan enfermas y acaben con el capítulo del cáncer de mama de su vida", ha dicho la oncóloga del Hospital Universitario Canarias (Tenerife), Josefina Cruz.

De hecho, el impacto y seguimiento de la enfermedad afecta de tal manera que más del 95 por ciento de las mujeres cree necesario poder solicitar una reducción de jornada tras la baja de enfermedad oncológica, según los datos de una encuesta de FECMA.

"La legislación actual ampara las consultas médicas de seguimiento o tratamiento. Sin embargo, son necesarias medidas legales que permitan la incorporación progresiva de la paciente a su puesto de trabajo; que las reducciones por baja de enfermedad no sean de la totalidad de la jornada laboral; y una mayor flexibilidad y casuística en el tratamiento para poder llegar a un punto intermedio en todo lo que hace referencia al seguimiento y no limitarse exclusivamente a si una paciente está de alta o de baja de manera binaria", ha argumentado el secretario general de la Asociación Europea de Derecho Sanitario, Joaquín Cayón.

En este sentido, Cruz ha recordado que cada paciente vive la enfermedad de una manera, pero les ayudaría poder llevar a cabo una reincorporación gradual o una reducción de jornada. "A muchas mujeres les da miedo reincorporarse porque no van a poder llegar a hacer el trabajo que requiere su empresa y eso puede ser negativo de cara a su continuidad en la empresa o, incluso que tenga problemas para conservar su puesto de trabajo", ha destacado la doctora.

Por su parte, la representante de FECMA, Catiana Martínez, ha asegurado que el ámbito laboral es, sin duda, uno de los aspectos que más preocupación generan a las mujeres tras un proceso de enfermedad; sin embargo, es importante considerar muchos otros, que han sido analizados en nuestra encuesta y que no siempre son abordados. "Es el caso, por ejemplo, de los servicios de apoyo social, del acceso a terapias de psicooncología cuando son necesarias* Hay muchas necesidades que trascienden a la enfermedad; parte de ellas serían cubiertas con una mejor coordinación entre los servicios sociales y sanitarios", ha detallado.

En este sentido, la doctora ha recalcado que las mujeres cuando vuelven a su entorno laboral se encuentran mejor, tienen ganas de empezar, pero tienen miedo de poder seguir con su vida laboral y personal, ya que han estado durante un largo tiempo con un tratamiento más agresivo y ahora llevan un tratamiento de mantenimiento, pero que tampoco les permite estar al cien por cien.

Y es que, para Cruz, estas pacientes todavía tienen secuelas, no acaban de verse de la misma manera y tienen mucha inseguridad, dependiendo siempre de su carácter, personalidad y tipo de trabajo. "Por ese motivo, se tendría que contemplar una ley de media jornada, para ver cómo se desenvuelve y cómo se encuentra. Todo esto podría ayudar a que volvieran con más entusiasmo a su puesto de trabajo y supondría una mayor satisfacción tanto para la sociedad como para las pacientes que lo único que quieren es recuperar su vida normal", ha zanjado.

Leer más acerca de: