MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia (Estados Unidos) han descubierto una forma de identificar a las embarazadas con riesgo de preeclampsia, un trastorno grave caracterizado por hipertensión arterial y disfunción renal que puede provocar parto prematuro y que supone la segunda causa de mortalidad materna en todo el mundo.
En su estudio, publicado en la revista científica 'Journal of Lipid Research', descubrieron que podían predecir el riesgo de preeclampsia examinando los lípidos (grasas) presentes en la sangre de las mujeres durante el embarazo.
Además, el método funcionó independientemente de que las mujeres estuvieran en tratamiento con aspirina, que se suele recetar a las mujeres que se cree que están en riesgo.
"Aunque se sabe que en la preeclampsia se producen alteraciones en algunos niveles de lípidos en sangre, no se han considerado biomarcadores útiles. Nuestro estudio presenta el primer análisis exhaustivo de especies lipídicas, que arroja un perfil distintivo asociado al desarrollo de preeclampsia. La 'firma' lipídica que hemos descrito podría mejorar significativamente la capacidad de identificar a las pacientes que necesitan un tratamiento preventivo, como la aspirina, o un seguimiento más cuidadoso de los primeros signos de la enfermedad para poder iniciar el tratamiento a tiempo", ha explicado Charles E. Chalfant, uno de los responsables del estudio.
La preeclampsia afecta hasta al 7 por ciento de todos los embarazos. Los síntomas suelen aparecer después de las 20 semanas e incluyen hipertensión, problemas renales y anomalías en la coagulación sanguínea.
Esta enfermedad conlleva complicaciones peligrosas, como disfunción renal y hepática y convulsiones, así como un mayor riesgo de cardiopatías para las madres. Se calcula que cada año mueren 70.000 mujeres en todo el mundo por preeclampsia y sus complicaciones.
Los médicos suelen recomendar dosis bajas de aspirina a las mujeres de riesgo, pero sólo funciona en la mitad de las pacientes y debe iniciarse en las 16 primeras semanas de embarazo, mucho antes de que aparezcan los síntomas. Por eso es tan importante identificar pronto a las mujeres de riesgo y comprender mejor la preeclampsia en general.
Chalfant y su equipo querían encontrar "biomarcadores" (indicadores biológicos) en la sangre de las embarazadas que pudieran revelar su riesgo de desarrollar preeclampsia. Examinaron muestras de plasma sanguíneo recogidas de 57 mujeres en las primeras 24 semanas de embarazo y, a continuación, analizaron si las mujeres desarrollaban preeclampsia.
Los investigadores descubrieron diferencias significativas en los "lípidos bioactivos" de la sangre de las mujeres que desarrollaron preeclampsia y las que no.
Según los investigadores, esto debería permitir a los médicos estratificar el riesgo de las mujeres de desarrollar preeclampsia midiendo los cambios lipídicos en su sangre. Los cambios representan una importante "huella lipídica", según los científicos, que podría ser una herramienta útil para identificar, prevenir y tratar mejor la preeclampsia.
"La aplicación de nuestro método de perfil lipídico completo a la atención obstétrica rutinaria podría reducir significativamente la morbilidad y mortalidad materna y neonatal. Representa un ejemplo de cómo la medicina personalizada podría abordar un importante reto de salud pública", ha resaltado Chalfant.