Avanzan en el conocimiento de la epilepsia de Lafora, enfermedad neurodegenerativa sin cura ni tratamiento

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Investgadores del proyecto - INCLIVA
Publicado: lunes, 13 febrero 2023 11:37

VALNCIA 13 Feb. (EUROPA PRESS) -

Una investigación en la que colaboran el instituto de investigación INCLIVA, la Universitat de Valncia (UV), el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Raras (CIBERER) y el Instituto de Biomedicina de Valncia (IBV) del CSIC ha permitido encontrar diferencias en la producción de microARN (pequeñas moléculas reguladoras de la expresión génica) a nivel de tejido cerebral en ratones modelo de la enfermedad de Lafora que contribuirán a mejorar el conocimiento de esta patología a nivel molecular y mejorar su seguimiento.

La enfermedad de Lafora es un tipo de epilepsia neurodegenerativa que cursa con alucinaciones visuales y auditivas, así como otros síntomas neurológicos diversos; en todos los casos, con un deterioro progresivo y muy rápido que, tras manifestarse en la adolescencia, termina con un desenlace fatal, ya que no existe cura ni tratamiento, más allá de algunas terapias paliativas, explica INCLIVA.

Es una enfermedad minoritaria con una prevalencia estimada en apenas un caso por millón de habitantes, pero algo más frecuente en determinados núcleos de población; especialmente en regiones de la cuenca mediterránea, el norte de África o el sur de la India, por ejemplo.

Las alteraciones halladas a nivel celular y molecular, tanto en los pacientes como en los modelos celulares y animales de experimentación, dan cuenta de multitud de procesos alterados que son cruciales para el correcto funcionamiento del organismo, aportando interesantes pistas acerca de la fisiopatología que pueden servir, a su vez, para comprender mejor otro tipo de epilepsias o enfermedades similares a nivel molecular.

Los investigadores principales de esta investigación, publicada recientemente en International Journal of Molecular Sciences, son el profesor de la UV Carlos Romá-Mateo, del grupo de investigación en fisiopatología celular y orgánica del estrés oxidativo de INCLIVA, adscrito al CIBERER, y el doctor Pascual Sanz, líder de la unidad de señalización por nutrientes del IBV-CSIC.

Entre los autores del estudio figuran el doctor Federico Pallardó, coordinador del citado upo de INCLIVA; el doctor José Luis García Giménez, investigador CIBERER adscrito al grupo y coordinador en INCLIVA del grupo de investigación en epigenómica y epigenética traslacional; la doctrora Mireia Moreno, del IBV-CSIC y CIBERER; la Dra. Carmen Aguado, responsable del Biobanco CIBERER, y Concepción Garcés de la UV.

Romá-Mateo es, además, el investigador principal de la línea de investigación sobre la epilepsia de Lafora, desarrollada en INCLIVA y CIBERER, durante los últimos años, en estrecha colaboración con el grupo del doctor Pascual Sanz en el IBV-CSIC y CIBERER, con el objetivo de comprender mejor esta enfermedad rara y encontrar nuevas dianas terapéuticas.

DEFECTOS GENÉTICOS

A partir del análisis de las vías moleculares implicadas en regular el estrés oxidativo celular, los investigadores han ido profundizando en las relaciones existentes entre estas rutas y la fisiopatología de multitud de enfermedades minoritarias, debidas a defectos genéticos que dan lugar a alteraciones en el funcionamiento celular.

En el desarrollo de estas investigaciones se ha descubierto que muchas de las moléculas implicadas en estos defectos, a veces de manera indirecta, se pueden usar como una guía para conocer mejor tanto los síntomas como el avance de algunas enfermedades que empeoran progresivamente, como la epilepsia de Lafora.

El trabajo partió como una continuación de un estudio realizado en ratones modelo de la enfermedad, donde se analizó el perfil de expresión génica. En esta ocasión se llevó a cabo un análisis similar, pero centrando la atención en un tipo de genes concretos; aquellos que no dan lugar a la creación de proteínas en el organismo, sino a unas moléculas conocidas como microARN, que constituyen una herramienta de control de los propios genes del organismo.

Por tanto, se secuenció ARN de pequeño tamaño y, al analizar los datos informáticamente, se descubrió que en los ratones modelo de la enfermedad, a diferencia de los ratones control sanos, existían dos tipos concretos de microARN que estaban muy elevados. Estos microARN también se han encontrado elevados en otras patologías que cursan con epilepsia, pero es la primera vez que se hayan en modelos de enfermedad de Lafora.

Además, la investigación muestra que este aumento progresaba según los animales envejecían, pudiendo por tanto ser utilizados como un mecanismo de seguimiento del avance de la enfermedad a nivel molecular. En paralelo se halló que algunos genes relacionados con los procesos de inflamación en el sistema nervioso central estaban también aumentados, completando así y enriqueciendo el panorama obtenido gracias al estudio previo a nivel de expresión génica.

La secuenciación de los microARN se realizó en la unidad de secuenciación de la Unidad Central de Investigación de Medicina (UCIM) en la Facultad de Medicina de la UV, gracias al equipamiento adquirido mediante fondos FEDER a través de la Alianza de Investigación Traslacional en Enfermedades Raras de la Comunitat Valenciana (AITER) de la que la UV, INCLIVA, CIBER y el IBV-CSIC son miembros. Este trabajo es fruto de un proyecto del programa Acciones Intramurales del CIBER (ACCI) 2020-2022 y se ha planteado una continuación para la próxima convocatoria.

El Día Internacional de la Epilepsia se celebra el segundo lunes de febrero para llamar la atención sobre la necesidad de continuar investigando en su conocimiento, frenar el deterioro progresivo que se produce en muchos casos y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.