MADRID, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los inhibidores del punto de control inmunitario, que desencadenan la respuesta inmunitaria contra las células tumorales, han revolucionado el tratamiento del cáncer; sin embargo, los medicamentos no son eficaces en un gran número de pacientes, incluidos los que padecen cáncer colorrectal.
Una nueva investigación dirigida por investigadores del Hospital General de Massachusetts (MGH), en Estados Unidos, y de la Universidad de Ginebra (UNIGE), en Suiza, permite entender por qué algunos tipos de cáncer colorrectal no responden a los inhibidores de puntos de control inmunitarios y ofrece una estrategia para superar su resistencia, según publican los autores en la revista 'PNAS'.
"El cáncer colorrectal es la segunda causa de muerte relacionada con el cáncer en todo el mundo --recuerda el autor principal y coautor Rakesh K. Jain, director de los Laboratorios E.L. Steele de Biología Tumoral del MGH y profesor Andrew Werk Cook de Oncología Radioterápica de la Facultad de Medicina de Harvard (HMS)--. Una de las principales causas de mortalidad en los pacientes con cáncer colorrectal es el desarrollo de metástasis en el hígado, que es la propagación del cáncer al hígado".
Jain explica que la mayoría de los cánceres colorrectales que se extienden al hígado no responden a los inhibidores de puntos de control inmunitarios.
Cuando el equipo inyectó estas células de cáncer colorrectal bajo la piel del flanco posterior de los ratones (el método más utilizado para estudiar el cáncer en estos animales), las células respondieron bien a los inhibidores del punto de control inmunitario, a diferencia de lo que ocurre en los pacientes.
Para resolver esta discrepancia, los investigadores decidieron adoptar un enfoque denominado ortotópico (que significa "el lugar normal del cuerpo"), inyectando las células cancerosas en los lugares anatómicos pertinentes; por ejemplo, el colon, donde crecen las células primarias del cáncer colorrectal, y el hígado, donde estas células hacen metástasis.
"Descubrimos que estos modelos de ratón de cáncer colorrectal eran profundamente resistentes a los inhibidores de puntos de control inmunitarios, de forma similar a lo que se observa en los pacientes", dice el coautor Dai Fukumura, subdirector de los Laboratorios E.L. Steele en el MGH y profesor asociado de oncología radioterápica en el HMS.
"Nuestros resultados ponen de manifiesto cómo el entorno en el que crecen las células cancerosas puede influir en la eficacia de la inmunoterapia --prosigue--. Además, y lo que es más importante, indican que estos modelos ortotópicos de cáncer deben utilizarse para estudiar la resistencia al bloqueo de los puntos de control inmunitarios, como se observa en los pacientes con cáncer colorrectal".
Para determinar cómo las metástasis hepáticas son resistentes al bloqueo de los puntos de control inmunitarios, Jain y sus colegas investigaron la composición de las células inmunitarias presentes en las metástasis hepáticas en ratones y la compararon con la de las células de cáncer colorrectal inyectadas bajo la piel.
"Descubrimos que las metástasis hepáticas carecían de ciertas células inmunitarias -llamadas células dendríticas- que son necesarias para la activación de otras células inmunitarias conocidas como linfocitos T citotóxicos, que pueden eliminar las células cancerosas --subraya el autor principal, el doctor William W. Ho, investigador del MGH--. Vimos una situación similar en los pacientes: sus metástasis hepáticas mostraban una falta de células dendríticas y linfocitos T activados".
Cuando el equipo aumentó el número de células dendríticas dentro de las metástasis hepáticas (administrando a los ratones un factor de crecimiento llamado Flt3L), el tratamiento condujo a un aumento de los linfocitos T citotóxicos dentro de los tumores y provocó que los tumores se volvieran sensibles a los inhibidores de puntos de control inmunitarios.
"Nuestro estudio pone de relieve la importancia de los modelos tumorales ortotópicos en los estudios de inmunoterapia y subraya la importancia de las células dendríticas para el bloqueo eficaz de los puntos de control inmunitarios", afirma el coautor Mikael J. Pittet, doctor y profesor de Inmunología de la UNIGE.
"También apunta a la posibilidad de desarrollar nuevas terapias que podrían ser eficaces para controlar el cáncer colorrectal resistente --añade--. Por ejemplo, la combinación de Flt3L con inhibidores de puntos de control inmunitarios es una opción terapéutica interesante que merece la pena evaluar en ensayos clínicos".