MADRID 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha alertado de que los miles de millones de dólares generados por la venta ilícita de drogas impulsan cada vez más las actividades terroristas e instigan otros delitos como, por ejemplo, la trata de personas y el contrabando de armas y personas. Por ello, ha abogado por trabajar "todos" en la lucha contra el narcotráfico.
Con motivo del Día Internacional de la Lucha contra el Uso y el Tráfico Ilícito de Drogas, Ban Ki Moon ha recordado que la impunidad con la que se llevan a cabo las operaciones de tráfico de estupefacientes genera un "miedo cerval" y siembra la "desilusión" respecto a todas las instancias de gobernanza.
En este sentido, el secretario general de Naciones Unidas ha avisado de que América Central se enfrenta a niveles "cada vez más elevados" de violencia como consecuencia de la delincuencia organizada transnacional y el narcotráfico. Y es que, además, actualmente la región registra las tasas de homicidio "más altas" del mundo.
Es más, ha proseguido, en Afganistán las actividades de desarrollo se están viendo obstaculizadas por el aumento de la violencia ocasionada por el tráfico de opio dado que la región cuenta con las "mayores tasas" de prevalencia de opiáceos del mundo. "En algunas partes de Myanmar, los agricultores padecen inseguridad alimentaria, lo que les obliga a cultivar amapolas como un cultivo comercial", ha recalcado.
No obstante, otros de los grandes problemas causados por la venta de drogas ilícitas a los que se enfrenta el mundo es que los países de tránsito ya no son simples eslabones de la cadena de suministro, sino que se han convertido en lugares de destino. En concreto, cerca de la mitad de la cocaína que se trafica a través de África occidental y central queda en la región.
Este hecho hace que se esté poniendo "en peligro" los adelantos logrados "con tanto esfuerzo" por los países en favor del desarrollo sostenible y la "buena" gobernanza. "Estos problemas son una prueba de fuego para el África occidental y central, por donde pasa una de las principales rutas de tráfico de drogas hacia Europa. Los países de la región son sumamente vulnerables pues sus instituciones jurídicas y financieras suelen ser deficientes", ha comentado Ban Ki Moon.
CONVENCIONES DE LA ONU PARA SOLUCIONAR ESTE PROBLEMA
Dicho esto, el secretario general de la ONU ha destacado la labor realizada en las convenciones de Naciones Unidas sobre drogas, delincuencia y corrupción porque, a su juicio, constituyen una base "sólida" para adoptar soluciones globales a esos problemas.
En conjunto, esos instrumentos ofrecen un enfoque "equilibrado" para detener el tráfico, promover alternativas viables para los agricultores de cultivos comerciales y permitir que los consumidores de drogas recuperen su salud y se salvaguarden sus derechos humanos.
"Nuestros esfuerzos para promover el desarrollo y luchar contra las drogas y el delito tendrán más eficacia si se basan en alianzas con los jóvenes, la sociedad civil, los gobiernos y la comunidad internacional. Trabajando podremos aliviar los sufrimientos de millones de personas y librar a los países, las comunidades y las familias del flagelo de las drogas y la delincuencia", ha zanjado.