MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
El bruxismo puede provocar problemas en la articulación temporomandibular (ATM) como resultado del bruxismo, según ha determinado un estudio realizado en la Clínica Universitaria de Odontología de la Universidad de Medicina de Viena (Austria).
Los resultados del estudio, que se han publicado en la revista 'Journal of Advanced Research', señala que el bruxismo es más común en las personas jóvenes. La investigación se ha basado en la teoría de que las combinaciones específicas de la forma del diente y la ubicación del diente durante el pulido tienen una influencia en la carga mecánica sobre la articulación temporomandibular y, por lo tanto, pueden considerarse un factor de riesgo para los trastornos de la ATM.
Los investigadores han utilizado un modelo informático que incluye estructuras óseas, cartilaginosas y musculares. El tema de la investigación fue la interacción de dos factores que coinciden en el fenómeno del bruxismo. El primero de ellos es la forma del diente afectado, más precisamente el ángulo de inclinación de la cúspide dental que está en contacto con su opuesto durante el tallado.
El segundo es la ubicación del contacto del diente (la llamada faceta de desgaste) durante un movimiento de rectificado dinámico, que fue considerado por el equipo de investigación. El estudio simuló los efectos del pulido lateral en el primer molar y en el canino con seis diferentes inclinaciones de facetas de desgaste.
"Nuestros resultados muestran que tanto la inclinación como la ubicación de las facetas de desgaste influyen en la fuerza de la carga mecánica sobre la articulación temporomandibular. Sin embargo, parecería que el factor decisivo es la inclinación de la faceta de pulido. Cuanto más plano sea el diente, mayor será la carga sobre la articulación y, por lo tanto, mayor será el riesgo de un trastorno de la ATM", ha explicado el principal autor del estudio, Benedikt Sagl.