MADRID, 10 May. (EUROPA PRESS) -
El 24,7 por ciento de los jóvenes de 16 a 30 años tiene sobrepeso u obesidad, según una encuesta realizada por la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO) a un millar de jóvenes y que refleja "importantes déficits y áreas de mejora", tal y como señalan desde la sociedad científica.
En este estudio, como detalla el presidente de SEEDO, el doctor Francisco Tinahones, se han valorado una gran cantidad de aspectos relacionados con el peso corporal en una población donde habitualmente existen menos datos. "Conocer la prevalencia de obesidad en ese rango de edad, la percepción sobre su peso de los jóvenes, las causas de un peso no adecuado y conocer las estrategias utilizadas para bajar de peso han sido los objetivos principales", abunda.
Así, otro dato que ha llamado la atención en el estudio es que hasta el 80 por ciento de estos jóvenes asumen que la obesidad y el exceso de peso son una enfermedad, a diferencia de la población general, quienes, en su mayoría, no lo reconocen como tal.
Además, un 28,6 por ciento de los jóvenes considera que tiene exceso de peso, porcentaje que asciende al 73,1 por ciento entre los que tienen obesidad o sobrepeso. Según comenta el doctor Tinahones, "este dato contrasta con estudios anteriores en población general, donde solo un 20 por ciento de los obesos se reconocía como tal". La mayoría de los obesos admite que empezaron a subir de peso en la adolescencia.
Con todo, Tinahones advierte de que, pese a que esta población reconoce el sobrepeso como enfermedad, estos no acuden a médicos de familia o a nuticionistas para tratarse, sino que recurren a otras fuentes. En concreto, en este trabajo se aprecia que, al intentar adelgazar, la mayoría lo ha hecho "por su cuenta".
Tanto es así que solo un 14,8 por ciento de los jóvenes con sobrepeso u obesidad ha recurrido a un médico y un 36,8 por ciento a un nutricionista, mientras que el 50,1 por ciento ha seguido una dieta de Internet. Además, el 62,9 por ciento de los jóvenes sabe que hay fármacos para tratar la obesidad y el 80,6 por ciento conoce que la obesidad puede operarse.
EL ÍNDICE DE MASA CORPORAL
Por otro lado, la secretaria de la Junta Directiva de SEEDO, la doctora Susana Monereo, ha explicado que, en el porcentaje de jóvenes de 16 a 30 años que tienen sobrepeso u obesidad se ha registrado, en toda la muestra, un índice de masa corporal (IMC) medio de 23,18 (se considera peso normal un IMC entre 18,5 y 25). Por otro lado, el 7,9 por ciento tiene un IMC insuficiente.
Por tramos de edad, se observa que los jóvenes que tienen un IMC medio superior son los que se encuentran en el rango de edad de los 25-30 años, con un IMC medio de 24,06 (lo que contrasta con el IMC medio de 21,91 en jóvenes de 20 a 24 años).
Otro dato es que la obesidad o sobrepeso aumentan con la edad, alcanzando el máximo entre los 25 y los 30 años, con un 34,6 por ciento. La insuficiencia de peso, en cambio, se comporta en sentido opuesto, pues entre los 16 y los 19 años, un 12,8 por ciento tienen un IMC insuficiente, porcentaje que va disminuyendo conforme crece la edad de los entrevistados.
Asimismo, Monereo añade que no se aprecian diferencias relevantes en el IMC medio atendiendo al género. "Ser hombre o mujer no influye en el IMC medio; sin embargo, la falta de peso es más frecuente entre la mujeres: un 11,6 por ciento de las mujeres frente a un 4,4 por ciento de los hombres jóvenes tienen un IMC insuficiente", apunta la doctora.
Un 55,2 por ciento de los jóvenes encuestados querría estar más delgado, apreciándose significativas diferencias según el IMC de los entrevistados; así, el porcentaje asciende hasta el 89,7 por ciento entre los obesos/con sobrepeso. En este sentido, como subraya la doctora Susana Monereo, "llama también la atención que un 13,9 por ciento de los jóvenes con IMC insuficiente quiere perder peso".
Por otro lado, un 44,4 por ciento de los jóvenes afirma que alguna vez se le ha aconsejado perder peso, porcentaje que aumenta hasta el 80,1 por ciento entre los que declaran sobrepeso/obesidad; curiosamente, a un 17,7 por ciento de los jóvenes con IMC insuficiente también les ha recomendado perder peso (fundamentalmente personas de su entorno).
Asimismo, el 70,6 por ciento de los jóvenes ha intentado perder peso (más las mujeres que los hombres, un 78,2% frente al 63,4% por ciento), porcentaje que se eleva hasta el 90,3 por ciento entre los que tienen sobrepeso/obesidad. Entre los jóvenes con un IMC insuficiente, el 39,3 por ciento ha procurado adelgazar (la mayoría de ellos, más de una vez).
PERFIL DE LOS JÓVENES CON SOBREPESO/OBESIDAD
Asimismo, otro dato que se ha destacado a lo largo de la rueda de prensa es el sedentarismo registrado en este segmento poblacional. La falta de ejercicio, el picoteo provocado por ansiedad y la mala alimentación son, por este orden, las principales razones declaradas para explicar el exceso de peso.
Con todo, según llama la atención el presidente de SEEDO, "más de 1 de cada 3 jóvenes con sobrepeso u obesidad afirman tener un padre o una madre con exceso de peso, pero también está aumentada la prevalencia de obesos en su entorno de amigos y en las parejas, lo que advierte tanto sobre la posible influencia genética como de los hábitos de vida y alimenticios compartidos con familia y amigos".
Otro aspecto relevante que se subraya a partir de este informe es que el 88,8 por ciento de los jóvenes que creen tener exceso de peso reconoce que esto condiciona su vida, llevándole a sentirse acomplejado o incluso rechazado. Por tanto, la obesidad constituye para ellos un problema social y laboral en su relación con sus iguales.
Asimismo, el 63,4 por ciento de los jóvenes con exceso de peso tiene amigos con esta misma condición (13 puntos porcentuales más que entre el conjunto de jóvenes) y también es más habitual que tengan parejas con sobrepeso u obesidad (21,9% frente al 12%).
ESTILOS DE VIDA Y SALUD
En general, según lo califica la doctora Monereo, "los hábitos de vida y salud de los jóvenes que viven en España son muy mejorables", y este mal hábito está más extendido entre los hombres que en las mujeres (67% frente 55%). Así, según el informe, la falta de ejercicio causa fundamental de este problema. De hecho, solo el 10 por ciento de los jóvenes con obesidad hace actividad física diaria.
Además, tan solo el 16,5 por ciento de los jóvenes realiza deporte a diario y el 24,9 por ciento no lo practica nunca, porcentaje que aumenta hasta el 35,2 por ciento entre aquellos con sobrepeso/obesidad. Y más de una tercera parte (38,5%) de los jóvenes está más de 6 horas al día delante de una pantalla, un porcentaje que se eleva en 4 puntos más entre aquellos con sobrepeso u obesidad.
En cuanto a los hábitos de sueño, se aprecia que dormir menos de 6 horas al día es más frecuente entre los jóvenes con sobrepeso u obesidad (15,8% vs 10,5%).
Por último, en cuanto a posibles soluciones para corregir estos malos hábitos, y preguntado concretamente por la implantación del sistema Nutriscore en España, el presidente de la SEEDO ha reconocido que, pese a tener dudas con respecto al mismo porque "no etiqueta algunos alimentos razonablemente", está claro que "hace falta un etiquetado frontal que sea fácilmente reconocible".
"El etiquetado que tenemos ahora no ayuda a nadie, solo a gente muy formada y que tenga buena vista para ver los componentes en la información nutricional, por lo que, sin duda, hace falta un etiquetado frontal sencillo para que el usuario sepa identificar y diferenciar lo más sano de lo menos sano", ha zanjado.